Una empleada de una escuela de Florida que permitió que su hija transgénero jugara en el equipo de voleibol femenino de su escuela secundaria será suspendida por diez días después de que la junta del distrito determinara que violó la ley estatal.
La junta escolar del condado de Broward votó el martes 5-4 para suspender sin pago el empleo de Jessica Norton en la escuela secundaria Monarch, donde trabajaba como especialista en gestión de información y entrenadora de voleibol juvenil. No la despedirán porque se consideró que sería un castigo demasiado severo.
La junta determinó que las acciones de Norton violaron la Ley de Equidad en los Deportes Femeninos del estado, que prohíbe a las mujeres transgénero jugar en deportes femeninos de secundaria.
El gobernador republicano Ron DeSantis y la Legislatura la adoptaron en 2021, a pesar de la oposición de la junta de Broward.
La repercusión de la madre
"Luché muy duro durante 11 años para asegurarme de que se sintiera muy cómoda", señaló Jessica Norton después de escuchar la noticia sobre la sanción.
Su hija de 16 años jugó en el equipo de voleibol de la escuela de Broward en las últimas dos temporadas.
“Destruyeron su carrera en la escuela secundaria y sus recuerdos de toda la vida”, dijo Norton.
Debate de género: boxeadoras en los Juegos Olímpicos
Este caso forma parte de un debate sobre el género en el deporte que llegó hasta los Juegos Olímpicos de París.
La polémica estalló tras la participación este jueves de la boxeadora argelina Imane Khelif, luego de que su rival, la italiana Angela Carini, se retirara del combate alegando un fuerte dolor tras los golpes de su adversaria.
Su caso, como el de la boxeadora taiwanesa Lin Yu-ting, que debutó este viernes en París, reavivó la controversia sobre la participación olímpica de deportistas hiperandróginas y suscitó fuertes reacciones de figuras internacionales como Javier Milei, Giorgia Meloni, Donald Trump y Elon Musk.
Ambas boxeadoras habían fallado una prueba de género en 2023 debido a sus elevados niveles de testosterona.
Tres años atrás, ambas participaron en la cita olímpica de Tokio, pero en 2023 fueron descalificadas del Mundial por no superar pruebas de elegibilidad de género, una decisión tomada por la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
El Comité Olímpico Internacional (COI), que asumió la organización del boxeo olímpico por falta de transparencia en la FIB, ya había asegurado que todas las boxeadoras "cumplen las reglas de elegibilidad de la competición".
Con información de EFE y AFP