Andrés Scotti: “Acá no hay paciencia”

Es que mi futuro deportivo es semana a semana, día a día. Estoy en una edad que vivo el presente, trato de estar bien, desde que comencé mi carrera me tocó muy pocas veces estar afuera de la cancha y soy un agradecido. El físico se ha portado bien conmigo y yo también lo he tratado bien.

¿Las ganas de seguir jugando permanecen?

Me encanta entrenar, disfruto mucho, parece mentira pero me llamaron de afuera tres o cuatro clubes y les pregunto en broma ¿sabes la edad que tengo? ‘Sí, sabemos que tenes 38’, bien, te aviso por las dudas, el que avisa no traiciona. Mi idea era quedarme un año más en Nacional para salir campeón y por desgracia no se dio. Hicimos el esfuerzo, no salieron las cosas como uno deseaba, pero terminamos jugando, peleando una posible chance de meter a Nacional en la Copa y trataremos de esforzarnos para que suceda.

¿Le gustaría una revancha en Nacional?

No sé, vamos a ver. Quiero terminar el torneo y ojalá hacerlo bien. Fénix es un rival que siempre nos complica, es duro, después hay que vivir el presente y no adelantaranos. Disfrutar cada momento, lo mejor está por venir.

¿Disfrutó los últimos cuatro meses?

Según como se mire. Yo no soy tan drástico, lógicamente que hubo situaciones muy amargas como la derrota clásica, quedamos afuera de la Copa, se fueron entrenadores, son muchos cambios. Son las reglas de juego del fútbol, del uruguayo principalmente. Ojalá que de cara al futuro los clubes se organicen, planifiquen a largo plazo, pero también la gente quiere el resultado rápido, quiere el éxito, acá no hay paciencia, ya sea para los técnicos, para los jugadores… Jugadores han pasado un montón, el plantel sufrió una metamorfósis en estos dos años; nos pusimos a repasar nombres con los compañeros y es brutal. Esperemos que haya más estabilidad y que si el resultado no está se tenga paciencia que tarde o temprano llegan. Lo vimos claramente en la selección.

¿Fue apresurada la salida de Pelusso?

No quiero hacer balance. El Vasco duró seis meses, el Chavo duró ocho meses, es complicado. Creo que todos tenían la ilusión de que nos fuera bien, trabajaron de la mejor manera.

¿Qué responsabilidad tienen los jugadores?

Tenemos como todos, no le sacamos el pecho a las balas, somos los que entramos a la cancha, pero hemos rotado una cantidad. Repasame en estos dos años, el Ale (Lembo) ahora es gerente y hace un año estaba jugando, el Hueso, Efraín Cortés, Rolín, Jadson Viera, el Loco Abreu, Gonzalo Bueno, Vicente Sánchez, Viudez, Albín, Damonte, Placente... es un poco las reglas de juego. Lo lindo es que se cree una estructura, una base, se arme, se organice para sostener y que los resultados lleguen. No te garantiza nada hacer las cosas bien, pero te da más chance de que te vaya bien.

¿Hasta que punto influyeron los juveniles en la recuperación?

Creo que todos, los que están jugando, los que no. Es fundamental que nunca bajen la guardia, que sigan trabajando; si capitalizan el hecho de no haber tenido buenos resultados para el futuro va a ser bueno porque salís fortalecido. La única receta es trabajar y redoblar esfuerzos ante la adversidad y el unico derrotado es el que se entrega.