Gonzalo Ferreira

Comisión Verdad y Justicia perdió a más de la mitad de sus integrantes

Mientras Roger Waters volvió a poner el tema de los desaparecidos sobre la mesa, cada vez son menos los que trabajan para el grupo que conformó Tabaré Vázquez para investigar sobre los desaparecidos en la dictadura

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06 de noviembre de 2018 a las 05:04

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Este sábado Roger Waters cantó las dos últimas canciones de su concierto con una remera que decía "todos somos familiares". Según explicó Ignacio Errandonea, integrante de la organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos, fue una gestión de la periodista de Radio Uruguay, Alejandra Casablanca: "Nos trajo la propuesta, le dijimos que si, le entregó la remera y el resultado fue espectacular", celebró. Si bien en el concierto el músico se entreveró cuando quiso hacer alusión a la remera y mencionó a los charrúas, el hecho dejó muy conforme a los familiares y sirvió poner sobre la mesa un asunto en el que los resultados no vienen siendo los esperados.  

Si bien al asumir el gobierno el presidente Tabaré Vázquez creó que la comisión Verdad y Justicia, a la que le encomendó la tarea de investigar y recolectar información respecto a los desaparecidos durante la dictadura militar, la poca colaboración de los militares motivó a que varios de sus integrantes decidieran abandonar la comisión, ya que no pudieron avanzar acorde a lo que tenían previsto, al punto que el grupo está casi desmantelado. 

Originalmente el grupo de trabajo estaba compuesto por los diputados oficialistas Macarena Gelman y Felipe Michelini, Susana Andrade como representante de la colectividad afrodescendiente, Ademar Olivera por la Iglesia Metodista, Pedro Sclofsky por la comunidad judía y Mario Cayota como representante de la Iglesia Católica. La organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos era representada por Emilia Carlevaro. 

Hoy en día solo Felipe Michelini, Pedro Sclofsky y Macarena Gelman siguen trabajando para este grupo, aunque Gelman participa "esporádicamente", según informó a El Observador

El primero en abandonar el equipo de trabajo fue Mario Cayota al ser designado como embajador en el Vaticano, cargo en el que asumió en enero de este año. Lo siguió Olivera, quien dio un paso al costado en febrero motivado por su estado de salud y por la falta de resultados obtenidos. “Vázquez siempre nos manifestó su apoyo y estuvo a disposición de nuestros planteos. A veces los mandos intermedios complican un poco la cosa, pero él estuvo involucrado. El problema es que los militares buscaban siempre formas de obstaculizar nuestro trabajo y estaban reacios a aportar información”, dijo. 

La organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos pegó un portazo en marzo a raíz de un dato aportado por el Ejército que no resultó verdadero y pidieron "la remoción inmediata" de Manini Ríos. “Fue la gota que desbordó el vaso. Si bien se hacían excavaciones, no teníamos los datos necesarios. Cuando nosotros lo criticamos, Presidencia respaldó a Manini Ríos”, dijo a El Observador Ignacio Errandonea, integrante de la organización de familiares. 

Según recordó, el presidente Vázquez les prometió una reunión cuando conformó el equipo de trabajo pero nunca se las quiso dar. 

“Una comisión que busca a los desaparecidos que no tiene el respaldo del Poder Ejecutivo está condenada al fracaso. Los familiares siempre colaboramos con todas las comisiones que se formaron, pero las investigaciones son facultad de los organismos competentes”, dijo Errandonea. 

Por la misma molestia con el jefe del Ejército, en julio Andrade tomó el mismo camino y abandonó el grupo. La también diputada suplente le envió una carta de renuncia al presidente Vázquez en la que explicaba que renunció por los “constantes desbordes en acciones y declaraciones” del comandante en Jefe del Ejército, Guido Manini Ríos. 

Pese a que no obtuvieron los resultados esperados por los frenos externos, los exintegrantes de la comisión consultados coincidieron en destacar algunos logros como que se pudo ampliar el material de archivo, recolectar información sobre la marina, digitalizar algunos rollos y se abrieron documentos a la prensa y a los interesados. De constante colaboran antropólogos, historiadores y bibliotecarios. A su vez, a nivel judicial, con la creación de la Fiscalía especializada en Derechos Humanos, a cargo de Ricardo Perciballe, se logró reactivar algunas causas, ha pedido procesamientos de militares y se retomaron trabajos de excavaciones. 

Fiscal solicitó permiso para excavar en el Batallón 14 

“Con Perciballe la cosa está mejorando”, dijo Ademar Olivera. El fiscal le solicitó al juez penal José María Gómez que autorice el ingreso de un grupo de antropólogos al Batallón 14 para buscar restos de desaparecidos.

Dadas algunas anomalías que presenta ese terreno presumen que en ese predio pudo haber cuerpos sepultados y es por eso que Perciballe solicitó las tareas de remoción del terreno. El Equipo Argentino de Antropología Forense colaborará con las excavaciones. Los antropólogos se mostraron con mucha cautela con el objetivo de no generar falsas expectativas. 

“La Fiscalía de Derechos Humanos en el tema de juicios está avanzando. Ha dado un nuevo impulso, lo vemos con buenos ojos y es un salto cualitativo importante”, concluyó Errandonea. 
 

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