Diego Battiste

Cosas veredes

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13 de julio de 2020 a las 14:51

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Por Nelson Rizzi

Según la página web Expresiones del español (www.expresiones.info), el significado de la frase cosas veredes (o tenedes) en nuestra lengua es el siguiente: “Comentario usado para expresar, con cierta sorna y posible escándalo, la opinión, ante un caso de ello, de que hay en la vida cosas verdaderamente sorprendentes o chocantes y llamativas y que pueden dejarle a uno perplejo o ante las que solo cabe la perplejidad”. Vaya si habré aplicado esa expresión a lo largo de mi vida.

Hoy estoy a poco más de una semana de cumplir mis 71 años y nunca tuve tanta certeza como la del lunes 6 de julio de 2020.

 Escuchando un programa radial de la mañana, oigo que en el currículum que está en la página web del estudio de abogados que integra el aspirante por el Frente Amplio (FA) a ocupar el directorio de nuestra principal empresa de telecomunicaciones, figura como ya integrándolo.

En la suposición de que alguno que otro problema auditivo que padezco me había jugado una mala pasada, no presté más atención al tema y continué con el desarrollo de mis actividades, hasta que luego de un rato el tema volvió recurrentemente a concitar mi atención.

Así pues que, de puro curioso, busqué en internet dicha página web y con gran sorpresa veo que se reproduce exactamente lo que en el programa radial referido había escuchado anteriormente.

Es decir que este aspirante a director por el FA, profesional de Derecho, se atribuye (vaya Dios a saber con qué finalidad) integrar el directorio de una empresa pública, sin ser esto cierto.

Acaso desconoce este profesional del Derecho que nuestra Carta Magna, en su artículo 187 establece que: “Los miembros de los Directorios y los Directores Generales que no sean de carácter electivo, serán designados por el Presidente de la República en acuerdo con el Consejo de Ministros, previa venia de la Cámara de Senadores”?

Si así fuere, flaco favor le estaría haciendo a la casa de estudios que le otorgó en su momento “el cartoncito” para el ejercicio de la abogacía.

Si no lo desconoce, como así supongo, ¿esto es una forma de ejercer alguna especie de presión política?

Y una última reflexión: ¿qué sucedería si yo agregara alegremente a mi currículum profesional que integro el directorio de una empresa pública y luego lo publicara, sin ser ello cierto?

Seguramente sería citado por algún miembro de la Fiscalía.

Entonces, por todo lo anteriormente expresado, vaya lo del título: cosas veredes.

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