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Escapadas a horas de Barcelona: conoce este bonito pueblo catalán rodeado de historia y naturaleza
España está lleno de pueblos ricos en historia a lo largo de su territorio y gran parte de estos son casi desconocidos y poco frecuentados por el turismo local. Villas impregnadas de aroma a naturaleza, llenas de paz y tranquilidad que cambiarán tu forma de ver la vida y comenzarás a elegirlas para próximos viajes cortos o escapadas de fin de semana.
Escondido en el valle de la Noguera de Tor, en la región de Cataluña, se encuentra un pequeño y encantador pueblito que se ha mantenido en gran parte alejado del radar turístico, ofreciendo así un refugio de tranquilidad y belleza natural. Con solo 80 habitantes, Durro es un remanso de paz que se alza a 1395 metros sobre el nivel del mar, rodeado de un entorno natural excepcional y resguardando dos monumentos que ostentan el título de Patrimonio de la Humanidad.
El verano está próximo a terminar en menos de 20 días y es por esto que necesitas organizar este viaje cuanto antes. Se encuentra a poco más de tres horas de viaje en coche y vale la pena conocer, de principio a fin, cada rincón de este pequeño lugar lleno de magia.
Escapadas a horas de Barcelona: Durro, el pueblo con menos de 100 habitantes en donde podrás pasar un fin de semana ideal
Este idílico rincón, que se unió al municipio del Valle de Boí en 1965, ha sido recientemente reconocido como uno de "Los Pueblos Más Bonitos de España", un honor recibido en este 2023. Durro es un destino perfecto en cualquier época del año, con sus casas de aspecto medieval construidas en piedra, calles empinadas y tejados de pizarra que le otorgan un encanto característico de la zona.
Este pueblo, ubicado en el Valle de Boí, se encuentra a más de 1300 metros de altitud sobre el nivel del mar y está lleno de historia. Caminando por sus pequeñas calles podrás encontrar la Iglesia de la Natividad de la Madre Dios de Durro. Un edificio románico, del siglo XII, patrimonio de la humanidad, que cuenta con una torre de cinco pisos, toda vestida de piedras, como el resto del sitio.
El municipio del Valle de Boí alberga un total de ocho iglesias y una ermita, la mayoría de las cuales datan de los siglos XI y XII. Otro punto de interés es la ermita de Sant Quirc, ubicada a 1500 metros de altitud y actualmente cerrada al público. En su interior alberga un retablo barroco, pero lo más destacado es el frontal románico del altar, que representa el martirio del santo y su madre Julita. Curiosamente, una reproducción de este frontal se encuentra en exhibición en el Museo Nacional de Arte de Cataluña en Barcelona.
Escapadas a horas de Barcelona: qué se puede hacer en el pueblo de Durro, donde viven solo 80 personas.
Dado su entorno natural, explorar las rutas senderistas en Durro es prácticamente una necesidad. Entre ellas, la Ruta de la Fauna, con una longitud de 7.5 kilómetros, es particularmente recomendable. Esta ruta lleva a los excursionistas por Sant Quirc y el mirador de la Escaleta, adentrándolos en zonas boscosas y ofreciendo vistas impresionantes.
Pero Durro no es solo un lugar de historia y naturaleza; también es el hogar de una tradición única catalogada como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. La Bajada de las Fallas de Durro es una festividad patronal que se celebra en junio para dar la bienvenida al verano. Esta celebración, centrada en el fuego como elemento purificador, implica talar un gran pino, conocido como "faro," y colocarlo en un lugar visible. En Durro, tres pinos se ubican en un camino de fuego que desciende desde la ermita de Sant Quirc hasta el centro del pueblo, donde se enciende una gran hoguera.
Si tu idea es visitar algunos pueblos más de esta región, Taüll, Barruera u Boí se encuentran a pocos kilómetros de distancia y te brindarán una experiencia similar llena de historia con sitios similares a los encontrados en Durro. El Valle de Boí está lleno de rincones mágicos que aguardan tu visita para que conozcas edificios como la Iglesia de Sant Climent (Taüll) o el Parque de Aigüestortes (Boí).
