Gargano no jugó por lesión, fue al Saroldi con su esposa, comió tortas fritas y se fue unos minutos antes

Sin embargo, el volante estuvo presente con su esposa Miska y uno de sus hijos en el Parque Saroldi.

Gargano, quien, como informó Referí, está en plenas tratativas para firmar un nuevo contrato con Peñarol por un año y medio, también tiene el apoyo del presidente Ignacio Ruglio quien este domingo dijo en el programa Punto Penal de canal 10 que él quiere que siga siendo el capitán hasta que culmine su mandato.

El futbolista vio todo el encuentro en la tribuna de enfrente a la oficial en el Saroldi, en donde se encontraban los directivos y los hinchas de las institución.

Su esposa fue a comprar unas tortas fritas para matizar un poco la tarde y el frío, y todos se retiraron unos minutos antes de que culminara el encuentro en el que Peñarol finalmente no pudo ganar y quedó con un pie y medio fuera de la carrera por el título del Torneo Apertura.

Según confió una fuente del club a Referí, el jugador tiene para cerca de una semana de recuperación y la sanidad no quiere apurarlo para el encuentro de la última fecha contra Cerro Largo del fin de semana que viene, en el que tampoco podrá estar Damián Musto por suspensión, ya que ante River Plate recibió su quinta tarjeta amarilla..