Diego Battiste

Horas trabajadas y ocupación del corazón industrial en su peor nivel en 15 años

El núcleo de la industria cayó 2,1% en 2018 y borró el repunte del año previo; entre los 19 rubros que componen el sector, 11 cerraron con una caída de su actividad

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11 de febrero de 2019 a las 18:37

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Luego de siete años de caída consecutiva, la industria uruguaya alcanzó en el último año el menor número de personal ocupado y horas trabajadas desde 2003. Los niveles de producción se reducen –en el núcleo duro industrial–, pero la caída del empleo se da a un ritmo más acelerado. Según los datos difundidos este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y procesados por El Observador, el núcleo duro industrial redujo su producción 2,1% en el promedio del último año.

Esta caída dejó atrás el incremento de 1,9% que tuvo lugar en 2017 y supone los menores niveles de producción desde el año 2010.

El indicador de núcleo duro industrial deja a un lado a los grandes agentes manufactureros –Ancap, UPM, Montes del Plata y Pepsi– que por su tamaño, sus dinámicas particulares y su escasa incidencia directa en el empleo industrial, distorsionan el análisis del grueso de las empresas.

Si se tiene en cuenta el total de las industrias, en el último año hubo un crecimiento de 11,6%. Sin embargo, esa expansión se explica en su totalidad porque en buena parte de 2017 la refinería de La Teja se encontraba paralizada por tareas de mantenimiento.

Entre los 19 rubros que componen el sector, 11 tuvieron una caída de su actividad, mientras que los restantes ocho aumentaron su producción. Esa relación fue la misma que durante el año anterior.

Dejando a un lado la producción de combustibles, vehículos automotores y el rubro minerales no metálicos fueron las ramas que más se expandieron en el último año (31% y 20%, respectivamente). En el otro extremo, las caídas más pronunciadas se dieron en otros equipos de transporte (-33%) y muebles y otras industrias (-25%). Por su parte, el rubro más relevante de la industria local, alimentos y bebidas, cayó 3,6% en el promedio del último año.

El impacto que tuvo la caída de la actividad en el núcleo duro industrial sobre el empleo en el sector se dio de manera amplificada. En la totalidad de las empresas –sin filtrar a los grandes agentes–, el personal ocupado se redujo 3,7% en el promedio del último año, mientras que la cantidad de horas trabajadas fue 5,1% más baja que en 2017.

La caída del empleo industrial y su correlato en el número de horas ocupadas es un proceso anterior al deterioro de la producción. El deterioro de esos indicadores se viene registrando durante siete años consecutivos y para alcanzar niveles de ocupación tan bajos como los actuales hay que retroceder al año 2003, posterior al deterioro que se dio en la crisis y anterior a la bonanza del ciclo externo favorable con precios altos de las materias primas.

Pesimismo a futuro

De cara al desempeño para 2019, la gremial que agrupa a los industriales tiene una visión de pesimismo. El presidente de la Cámara de Industrias (CIU), Gabriel Murara, consideró “preocupante” la caída que registró el núcleo industrial en diciembre. En es sentido, consideró que los “problemas de siempre” vinculados a la pérdida de competitividad se siguen arrastrando para este año. La gremial no tuvo respuesta a los insistentes planteos de rebajas en las tarifas públicas (combustibles y energía eléctrica) que viene pidiendo al Poder Ejecutivo.

A esto se suma, un panorama de retracción en la actividad turística, un sector que tiene incidencia directa en la actividad de industrias vinculadas al rubro alimentación, así como al flojo desempeño de las exportaciones (en enero bajaron 8,3% interanual).

Por otro lado, Murara consideró que la recuperación de Brasil prevista para este año ayudará a ganar “parte de lo perdido” en el último tiempo en ese mercado por parte de algunas industrias. “Para volver a crecer y volver a invertir se requieren rentabilidades por un tiempo sostenido”, precisó. En tanto, sobre la marcha de la economía argentina el panorama luce “algo más incierto” porque los privados están barajando una recuperación recién a partir de mediados de año, explicó el titular de la CIU.

Con esta coyuntura, la Cámara de Industria proyecta un desempeño para el núcleo de la industria “muy parecido” al de 2019 o incluso con “tendencia a la baja”, dijo Murara.

 

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