La marca argentina Body Sculpt llega a Uruguay y planea tres locales para 2022

La empresa nació como un emprendimiento familiar y de la mano de su diseñadora, Valeria López, escaló hasta convertirse en una de las principales marcas de indumentaria deportiva del país vecino. “Nuestra planta productiva tiene 3.000 metros cuadrados y está ubicada en el barrio de Mataderos, en Capital Federal”, dijo a Café & Negocios el director de marketing comercial de Body Sculpt, Leonardo Reboredo. 

La firma tiene dos locales propios en Capital Federal, uno en el barrio de Palermo y otro en el centro comercial Unicenter. A su vez, cuenta con unas 25 franquicias en Argentina.

Según describe su representante, hace dos años comenzó la inquietud de la compañía por cruzar fronteras y comenzar un proceso de internacionalización dirigido tanto a Europa como al resto de América Latina. “Por una cuestión de cultura similar y de cercanía entendimos que nuestro primer paso en la región debía ser hacia Uruguay”, indicó el director. La pandemia trajo consigo retrasos y burocracia que llevaron, incluso, a que varios integrantes del directorio-incluido Reboredo- se convirtieran en  residentes uruguayos para simplificar el ingreso de la marca a nuestro país.

Ahora, la empresa que ya está constituida en Uruguay comenzó por crear su sitio web, para continuar con un modelo de negocios centrado en el eCommerce —el fuerte de la marca—. “Hace un par de años que hemos desarrollado todo lo que tenga que ver con el comercio electrónico, tanto minorista como mayorista. Todas nuestras plataformas son digitales. Desde que un consumidor final adquiere una prenda hasta la reposición de los locales, todo está pensado para que esté digitalizado dentro de la empresa”, sostuvo Reboredo.

La marca especializada en ropa deportiva pretende replicar el sistema de franquicias que le ha dado buenos resultados hasta el momento. “Buscamos interesados en el país que apuesten por la marca y que confíen en un modelo de negocio realmente rentable como lo ha sido acá”, detalló el director. 
La inversión en una franquicia de Body Sculpt oscila entre los US$30.000 y los US$50.000 —la diferencia se atribuye a la ubicación de la tienda y cuál sea su metraje—.
La firma no descarta la posibilidad de incluir un local propio aunque la apuesta está centrada en llevar adelante el crecimiento a través de un modelo de franquicias, que desarrollarán en colaboración con 384 Group- empresa dedicada a la consultoría de este tipo de modelo de negocios-. “Si colocamos un local propio, le podríamos hacer competencia interna a una futura franquicia”, evaluó al respecto Reboredo.

De Uruguay a Latinoamérica

Una vez establecida en Uruguay, la intención de Body Sculpt es continuar con su expansión por el resto de Latinoamérica: Chile, Brasil, Paraguay y Bolivia serían sus próximos objetivos. 

Hace aproximadamente un año la empresa recorrió un camino similar en  Europa. En este caso desde Barcelona se despliega la participación de la compañía a través de la Comunidad Europea. De hecho, hoy en día están desembarcando en Francia y en Italia.