Las posibles estrategias y oportunidades para Uruguay tras el portazo de Argentina

Pero ¿están los países obligados a negociar de forma conjunta? En ese caso, ¿sería razonable que los restantes países del bloque pretendieran continuar el ritmo de su agenda pese a la salida de Argentina?

En su comunicado, Uruguay puso el foco en su "apuesta" a la integración de la mano de Brasil y Paraguay. Sin embargo, la salida de Argentina puso en jaque los objetivos del Mercosur de adoptar una política comercial común.

Para el decano de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Católica del Uruguay (UCU), Ignacio Bartesaghi, Uruguay tiene una oportunidad dentro de esta crisis que también alcanzó al bloque: llevar adelante negociaciones bilaterales.

"Uruguay nunca logró defender la bilateralidad del Mercosur. Siempre aparece la imposibilidad de cerrar acuerdos solos", indicó.

La decisión 32/00 ha sido una de las limitantes para Uruguay a la hora de negociar de forma bilateral. Establece que la constitución de un mercado común implica, entre otros aspectos, la necesidad de contar con una política comercial externa común. Se trata, según los analistas, de una decisión con varias interpretaciones; para unos, es sustantiva mientras que para otros, meramente declarativa, señaló Bas.

No obstante, esta decisión no fue incorporada en el ordenamiento jurídico de los estados partes del Mercosur y, por lo tanto, no entró en vigor.

Bartesaghi consideró que un camino posible para Uruguay sería eliminar esta "polémica" decisión, en acuerdo con los demás países del bloque. "Argentina dice que por mucho tiempo no va a querer cerrar acuerdos comerciales. Si te explica que se baja por esta crisis por coronavirus, lees que vuelve a cerrarse, y que se vienen medidas proteccionistas. Frente a eso, ¿Uruguay qué va a hacer? ¿Va a seguir discutiendo el apoyo del Mercosur como instrumento de inserción de Uruguay al mundo?", se preguntó.

El camino

Según Bartesaghi, Uruguay tendría que buscar una habilitación para negociar con Brasil y Paraguay la posibilidad de acuerdos bilaterales. "Que quede bien claro que podemos ir bilateralmente si no podemos ir juntos", señaló. 

En su opinión Uruguay tiene una ventaja con respecto a Brasil, ya que Argentina "va a cuidar" que Brasil no lleve adelante acuerdos que lo dejen fuera de competitividad. "A Argentina no le importan Uruguay y Paraguay. A Argentina le preocupa que el que se corte solo sea Brasil, pero con Uruguay es otra cosa, tiene que tener otra estrategia", apuntó. 

En este escenario, señaló que a Uruguay no le conviene entrar en la disputa que tendrá lugar entre Argentina y Brasil. En su lugar, debería acelerar su estrategia, consiguiendo tres o cuatro consensos básicos para poder avanzar en los acuerdos importantes para el país. "Hoy las oportunidades están en Asia-Pacífico, en China, Corea, Japón y economías del sudeste asiático", subrayó. 

Otros paso, según Bartesaghi, podría ser iniciar un proceso de debate interno para comenzar a reformar artículos que nunca se cumplieron. También, la creación de nuevos tratados que garanticen tanto que el comercio interregional siga su curso como la libertad para negociar a nivel internacional. 

Para el docente del Departamento de Ciencia Política de la Facultad de Ciencias Sociales especializado en relaciones internacionales, Camilo López Burian, esta discusión es una de las que preocupa a los industriales en Argentina, ya que si se avanza podría "inundar" de productos extrarregionales al mercado, que compiten e impactan en el desarrollo del sistema productivo.

López Burian matizó las intenciones de Uruguay de continuar el ritmo en los avances. "Creo que es poco probable que en este momento se avance profundamente en temas de política exterior, primero que nada porque Brasil está en una situación muy compleja, ya que su canciller parece tener colocada la agenda en otros asuntos prioritariamente y no es una figura que controle la totalidad de la agenda política brasileña", señaló. El profesor cree difícil que haya margen para "mover la agenda política". "Más allá de la discusión y los posicionamientos, el contexto de maniobra sistémico es de poder moverse poco", indicó. 

Reflexión