Desde antes de finalizar su mandato, Alberto Fernández y Fabiola Yañez ya habían decidido separarse, aunque el expresidente no lo había comunicado a sus amigos más cercanos. Testigos, tanto directos como indirectos, describen la relación como “tóxica” y "muy problemática" durante gran parte de su tiempo en la residencia de Olivos. La situación culminó con la denuncia por violencia de género y hostigamiento que Yañez presentó contra Fernández, acompañada de fotografías que muestran hematomas en su cuerpo y capturas de chats que sugieren episodios de golpizas reiteradas en la quinta presidencial.
Tras el fin del mandato de Fernández, Yañez decidió dejar Argentina y se estableció en Madrid junto a su hijo Francisco, de dos años, y su madre, Miriam Yañez Verdugo. Según su entorno, ella sentía que no podría vivir tranquila en Argentina debido a la repercusión del escándalo de la fiesta en Olivos, entre otras razones, y pensó que sería imposible retomar su carrera en el país. Fernández, por su parte, viajó a Madrid en al menos dos ocasiones, quedándose durante varias semanas, aunque su intención siempre fue seguir residiendo en Buenos Aires.
El primer viaje de Fernández a Madrid fue para las fiestas de fin de año. El 21 de diciembre, el expresidente anunció en su cuenta de la red social X: “Estoy partiendo a España en vuelo de Aerolíneas Argentinas para reencontrarme con mi familia y pasar con ellos la Navidad y el Año Nuevo”. Ambos celebraron la llegada de 2024 en el hotel Four Seasons de Salamanca, y el ex presidente permaneció en Madrid hasta el 25 de febrero. Durante esos días, fueron captados en video en una sucursal del Banco Santander, en la misma zona de Madrid, imágenes que posteriormente fueron publicadas por el sitio Nexofin.
El exmandatario percibe una pensión de privilegio de alrededor de $7 millones por su rol como expresidente y también firmó un contrato de trabajo con la Universidad Internacional de La Rioja, en España. Por otro lado, diversas fuentes del exgobierno aseguran que Yañez no tendría ingresos propios. Según personas cercanas a ambos, la pareja no habría acordado formalmente una cuota alimentaria para cubrir los gastos de Fabiola y Francisco en Madrid, pero Fernández habría decidido depositar sus ingresos provenientes de su actividad en España en una cuenta conjunta en el Banco Santander, para que ella pudiera administrar los gastos.
En los últimos tiempos, quienes interactuaron con Yañez afirman que había mencionado dificultades para pagar la escolaridad de Francisco, acumulando al menos dos cuotas impagas. Sin embargo, aquellos que hablaron con ella recientemente, tras su decisión de designar a Mariana Gallego como su abogada en la causa contra Fernández, aseguraron que Fabiola "no está sufriendo privaciones económicas ni tiene deudas". Incluso, habría expresado su intención de comenzar a trabajar “en una tienda” para ganar un sueldo, mientras su madre se encargaba de cuidar a su hijo.
El último viaje de Alberto Fernández a Madrid
El último viaje de Fernández a Madrid ocurrió el 23 de mayo, y regresó a Buenos Aires a finales de junio. Según pudo reconstruir La Nación, durante ese viaje, Fernández se alojó en un departamento diferente al de la ex primera dama. En medio de su estancia, el 13 de junio, el juez federal Julián Ercolini abrió un legajo reservado en la causa de los seguros, tras encontrar material que mostraba a Fabiola golpeada. Aunque en ese momento ella no quiso avanzar con la acción penal, finalmente decidió reabrir el caso y denunció que estaba siendo hostigada por Fernández.
Cuando Fernández viajó a Madrid por última vez, ya circulaban rumores de que Yañez estaba decidida a contar todo lo que había vivido en Olivos. La periodista Sandra Borghi, de Todo Noticias, reveló que un director español la había grabado durante varias horas y estaba preparando el material para venderlo a una plataforma de streaming en formato documental, que llevaría por título “Fabiola, la verdad”. Según Borghi, el documental constaría de “seis capítulos de 40 minutos” y se centraba en los detalles de la violencia física y psicológica que Fabiola Yañez habría sufrido.
Un exfuncionario que conversó con Fernández en los últimos tiempos relató que el expresidente, inicialmente, desestimó la existencia del documental, calificándolo como “una mentira de los medios”. Sin embargo, en el entorno de Alberto se comenta que la ex primera dama habría exigido una suma millonaria por la venta del material para el documental.
La vida de Fabiola Yañez en Madrid luego de denunciar a Alberto Fernández por violencia de género
Luego de la denuncia por violencia de género contra Alberto Fernández, surgieron nuevos detalles sobre la vida de Fabiola Yáñez en Madrid. Según una corresponsal argentina en España, la ex primera dama se encuentra "sola, perseguida y tiene miedo” y "hoy se la ve recluida en este departamento". Este viernes, el Gobierno informó que cambiaron su custodia.
La periodista Ana Gerschenson, del grupo Alpha Media, describió que “ellos se instalaron en diciembre, vino primero Fabiola Yáñez, en el barrio de Salamanca, es como una especie de Recoleta, donde hay todas marcas de lujo. Se los vio abriendo una cuenta en el Banco Santander. Cuando eran pareja también comiendo y celebrando la noche vieja en el Four Season, que está mil euros el cubierto”.
En una entrevista con Radio Rivadavia, Gerschenson detalló cómo la relación se deterioró: "todo se rompió cuando se supieron de estas denuncias y de las fotos que se filtraron. Hoy se la ve recluida en este departamento”. Además, comentó sobre la última aparición pública de Yáñez: “La última aparición pública fue en rastro, que es un mercado de San Telmo, y estaba sola, preguntando por libros antiguos y cuadros. Pudo salir porque estaba la madre con ella, ese es su entorno. Pero amigos no”.
Por último, Gerschenson destacó la tensión que se vive actualmente: “Ahora estalló todo, están llegando dos policías federales entre hoy y mañana y se complica un poco porque no hay buena sintonía entre el gobierno de Milei y el de Pedro Sánchez para poder coordinar cuestiones de seguridad”. Sobre este punto, añadió que “Patricia Bullrich está enviando a dos policías, porque Fabiola no confía. Está muy asustada y perseguida, tiene miedo de que alguien pueda filtrar información. No está asustada por su vida sino por su seguridad porque fue todo tan violento”.