El juez Humberto Otazú, encargado de la causa, concedió a ambos la posibilidad de cumplir prisión domiciliaria bajo estrictas condiciones:
La Justicia paraguaya permitió que evitara la prisión tras el pago de una fianza de US$150 mil. La misma medida fue aplicada a su secretaria, Iara Guinsel Costa, también involucrada en el caso.
El senador Edgardo Kueider, acusado de tentativa de contrabando al ser interceptado con más de US$200 mil sin declarar, cumple arresto domiciliario en un exclusivo departamento ubicado en el edificio Tierra Alta Del Maestro, en Asunción. Este inmueble de lujo ofrece pileta, gimnasio y quincho, entre otras comodidades.
Tras su detención, la Justicia paraguaya permitió que evitara la cárcel mediante el pago de una fianza de US$150 mil, una medida que también benefició a su secretaria, Iara Guinsel Costa, implicada en el caso.
Según la declaración de Guinsel Costa, el dinero correspondía a una sociedad anónima paraguaya para la que trabaja. Por su parte, Kueider negó cualquier relación con los fondos y aseguró: “No era mío”.
El juez Humberto Otazú, encargado de la causa, concedió a ambos la posibilidad de cumplir prisión domiciliaria bajo estrictas condiciones: deberán residir en Asunción, estarán supervisados por la policía y tienen prohibido salir del país.
Llama la atención que el lugar donde Kueider cumple su arresto es un complejo de alta gama ubicado en el exclusivo barrio Villa Morra, en Asunción. El edificio cuenta con instalaciones premium, como pileta, gimnasio, quincho y una terraza destinada al ocio y entretenimiento.
Los departamentos de este complejo están equipados con amplios balcones con parrilla, baños con acabados en mármol, aire acondicionado en todos los ambientes y cocheras privadas. Según su página oficial, las instalaciones “están diseñadas para satisfacer las exigencias más altas de confort y exclusividad”.
Frente a las críticas, el abogado de Kueider, Ricardo Preda, declaró que el departamento fue alquilado respetando las disposiciones judiciales, asegurando que cumple con las condiciones de seguridad y monitoreo establecidas por las autoridades.
El proceso judicial sigue su curso y, en caso de ser hallado culpable, Kueider podría enfrentar una condena de hasta dos años de prisión, además de procesos penales y tributarios adicionales.