Contexto
¿Qué impacto tiene la pérdida de los glaciares?
La pérdida de masa glaciar tiene consecuencias directas en el caudal de los ríos andinos, que dependen del agua de deshielo para su funcionamiento. Estos glaciares están distribuidos a lo largo de 3.500 km de la Cordillera de los Andes, abarcando 12 provincias y 39 cuencas hídricas. Además de su función como reserva de agua dulce, los glaciares juegan un rol esencial en mitigar los efectos de las sequías, contribuyendo significativamente a la estabilidad de las actividades socioeconómicas que dependen del agua.
¿Cuál es la situación actual de los glaciares?
Según Laura Zalazar, coordinadora del Inventario Nacional de Glaciares, el panorama es crítico a raíz de la pérdida constante de masas de hielo en 8.484 kilómetros cuadrados, de los 16.968 glaciares identificados, incluidos los 2.715 kilómetros cuadrados de los 890 glaciares de las Islas Georgias y Sandwich del Sur”.
¿Por qué es importante la protección de los glaciares?
El 70% del agua dulce del planeta se encuentra en los glaciares, lo que resalta la importancia de estos cuerpos de hielo no solo para Argentina, sino para la humanidad en su conjunto. En el marco del 28° Congreso Nacional del Agua, Koen Verbist, especialista de la Unesco, destacó que 2025 fue declarado el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares debido a la situación catastrófica en que se encuentran. Además, la Unesco lanzó el Decenio de Acción para las Ciencias Criosféricas (2025-2034) con el objetivo de impulsar la investigación científica y fomentar políticas de conservación globales.
¿Cómo afecta la minería al retroceso de los glaciares?
Aunque la minería está prohibida en zonas de glaciares, la actividad minera fue avanzando hacia áreas cercanas a estos cuerpos de hielo, lo que incrementó la amenaza para su conservación. Leandro Gómez, coordinador de la Fundación de Ambiente y Recursos Naturales, alertó que la actividad minera está ligada directamente al retroceso glaciar. Además, subrayó que el negacionismo del calentamiento global, sumado a posibles reformas a la Ley de Glaciares, podría agravar aún más la situación, priorizando intereses económicos por encima de la protección ambiental.
¿Qué otras amenazas enfrentan los glaciares de Argentina?
El retroceso de los glaciares no es un problema aislado de la Argentina. En América Latina, los glaciares en países como México, Perú, Ecuador y Bolivia perdieron cerca del 60% de su superficie desde 1962. En México, por ejemplo, los glaciares están al borde de la desaparición, mientras que en Perú y Bolivia muchos glaciares ya desaparecieron. Rodolfo Iturraspe, especialista en glaciares de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, destacó que este proceso de extinción también está ocurriendo en Argentina, como lo demuestra el caso del Ventisquero Negro en Cerro Tronador, que formó un nuevo lago entre 1990 y 2021.
¿Qué papel juega el monitoreo constante?
El monitoreo constante de los glaciares es esencial para comprender los procesos de retroceso y poder tomar medidas de conservación eficaces. Argentina es responsable de un gran porcentaje de los glaciares en América del Sur, y su pérdida afectaría a 36 cuencas hídricas que abastecen a más de 7 millones de personas en 1.800 localidades. El monitoreo permite tomar decisiones informadas sobre cómo proteger estos recursos hídricos y mitigar los impactos de su desaparición.
Cómo sigue
El futuro de los glaciares andinos de Argentina depende de un enfoque integral que combine la ciencia, la legislación y la conciencia pública. A pesar de los esfuerzos que se han realizado, la presión de la minería y el calentamiento global continúan siendo desafíos clave. La protección de los glaciares no solo es una cuestión ambiental, sino también una necesidad para la seguridad hídrica del país y de la región.
A medida que avanza el Decenio de Acción para las Ciencias Criosféricas, se espera que se refuercen las políticas de conservación globales y locales, con un mayor compromiso de los estados. La Argentina tiene una oportunidad única de liderar en la protección de los glaciares a nivel mundial, pero para ello será fundamental seguir avanzando en la investigación y en la implementación de medidas que garanticen su preservación a largo plazo.