La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, protagonizó este martes un sonoro lapsus durante la sesión de control en el Senado, al afirmar: “Queda Gobierno de corrupción para rato”, cuando en realidad quería referirse al Gobierno de coalición.
La equivocación provocó una inmediata reacción en la bancada del Partido Popular, cuyos senadores estallaron en carcajadas y aplausos, algunos incluso poniéndose en pie.
Díaz, visiblemente incómoda, trató de corregirse, pero el incidente ya había generado un intenso revuelo en el hemiciclo.
En ese momento, el presidente del Senado, Pedro Rollán, intervino para pedir orden: “Señorías, por favor, ruego a la bancada del Grupo Popular que guarden las formas”, solicitó mientras las risas persistían en la Cámara.
Cómo se desencadenó el lapsus de Yolanda Díaz
El lapsus se produjo mientras Díaz respondía a una pregunta de la portavoz del PP, Alicia García, sobre los casos de corrupción que, según los populares, afectan al Ejecutivo.
La dirigente del PP acusó a la vicepresidenta de ser una “avalista solidaria de las corrupciones del sanchismo” por su “silencio cómplice” ante los supuestos indicios de financiación irregular del PSOE en el marco del caso Koldo.
Durante su intervención, García cuestionó si Díaz mantiene su promesa de abandonar el Gobierno en caso de detectar corrupción estructural en el PSOE, o si se ha convertido en “una sanchista más” cómoda en el Ejecutivo.
Además, la senadora popular le reprochó “mirar hacia otro lado” en distintos escándalos, y la acusó de “usar el feminismo como cortina de humo” para tapar los problemas del Gobierno.
El PP y Vox adoptan la expresión "Gobierno de corrupción"
Por su parte, Yolanda Díaz respondió con dureza, asegurando que al PP la corrupción le “importa un rábano” y reivindicando que el Gobierno “va a continuar”.
El lapsus de la vicepresidenta fue aprovechado posteriormente por varios senadores del PP y de Vox, como José Antonio Monago, Luis Javier Santamaría y Ángel Pelayo Gordillo, quienes repitieron con sorna la expresión “Gobierno de corrupción” en sus intervenciones dirigidas a otros miembros del Ejecutivo, como la ministra de Defensa, Margarita Robles, o el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Monago, que intervenía justo después de Díaz, ironizó con que su comentario era “difícil de superar”, lo que volvió a desatar risas en el Pleno.
El incidente, ampliamente difundido en redes sociales, fue interpretado por la oposición como un desliz revelador del desgaste del Ejecutivo, mientras que en el entorno de Díaz lo enmarcan en un simple error verbal que fue inmediatamente corregido.
