La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, coincidieron en que la Unión Europea (UE) y Washington pueden alcanzar un acuerdo arancelario, aunque no avanzaron en detalles, tras su reunión este jueves en la Casa Blanca, en un clima distendido que dejó a la vista la buena sintonía entre ambos.
"Estoy segura de que podemos llegar a un acuerdo, y estoy aquí para contribuir a ello", dijo antes del almuerzo con el republicano la líder italiana, la primera gobernante europea en ser recibida por Trump tras el inicio de la guerra comercial que levantó nubarrones sobre el futuro económico a nivel global.
"Queremos hacer a Occidente grande de nuevo y lo podemos hacer juntos", lanzó Meloni después, sentada junto al mandatario de EEUU en el Salón Oval en la conferencia de prensa, en la que se prodigaron mutuos elogios y volvieron a mostrarse en sintonía.
Giorgia Meloni le dice a Trump que quiere hacer grande a Europa de nuevo
Trump, por su parte, dijo estar convencido "al 100 por ciento" de que Washington y Bruselas pueden alcanzar un acuerdo que, según agregó, debe ser "justo" y calificó a la política de ultraderecha como "una líder fantástica", al tiempo que elogió su política dura hacia la migración ilegal.
Meloni apuesta a la sintonía ideológica con Trump
Meloni fue crítica de la política arancelaria implementada por Trump y calificó como "erróneos" los aranceles del 20% impuestos a las exportaciones de la UE, que luego fueron pausados durante 90 días, pero busca esforzarse para mantener los lazos con EEUU, a sabiendas de que es una de las pocas líderes que sintoniza ideológicamente con la Administración republica.
De hecho, fue una de las pocos gobernantes invitada a la asunción de Trump en enero pasado, junto al presidente argentino Javier Milei.
Por eso, frente al estupor de Europa tras el anuncio de los aranceles, Meloni instó a sus socios a no buscar represalias y mantener la cabeza fría.
Medios italianos especulaban que el encuentro de la líder de Hermanos de Italia podría abrir la puerta a una reunión entre Trump y la presidenta de la Comisión Europea (CE), Úrsula Von der Leyen, quien pidió la eliminación recíproca de aranceles industriales con la UE, lo que EEUU aún no consideró.
Visita de Trump a Roma
Lo que sí logró fue que el mandatario estadounidense aceptara visitar de manera oficial Roma "próximamente", lo que allanaría el camino a un nuevo encuentro en territorio europeo.
Altos cargos estadounidenses aseguraron que Meloni y Trump tienen una "relación muy especial", y añadieron que ella podría ser un puente para un acuerdo sobre aranceles entre Europa y Washington.
Claro que el acercamiento entre Meloni y Trump también generó algunas rispideces y preocupaciones entre aliados de la UE que temen por la unidad del bloque.
"Si empezamos a tener discusiones bilaterales, obviamente se romperá la dinámica actual", advirtió la semana pasada el ministro de Industria francés, Marc Ferracci.
Una portavoz de la Comisión Europea dijo que, aunque la UE por sí sola podía negociar acuerdos comerciales, el "acercamiento de Meloni es muy bienvenido" y se coordinó con Bruselas, según indicó la agencia AFP.
Otro punto que Trump y Meloni se esforzaron en dejar claro fue su visión común en temas como políticas de diversidad, equidad e inclusión, que forman parte de la batalla cultura que emprendieron los líderes conservadores a nivel global.
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Úrsulo von der Leyen y Giorgia Meloni
Un viaje a contramano de Pedro Sánchez
Pero la visita de Meloni a la Casa Blanca también fue la contracara esta semana del reciente viaje del jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, a China, donde se reunió con el presidente Xi Jinping, en medio de la escalada de tensiones comerciales con Estados Unidos.
Días después, Sánchez envió a su ministro de Economía, Carlos Cuerpo, a Washington para un encuentro con el secretario del Tesoro, Scott Bessent, para bajar tensiones e intentar destrabar la guerra arancelaria, que aún tiene final incierto.
