Muere el exgobernador y preso político venezolano Alfredo Díaz, detenido desde hace más de un año en El Helicoide
El ex gobernador de Nueva Esparta, que se encontraba detenido hace más de un año en la cárcel denunciada por violaciones a los derechos humanos, falleció bajo custodia estatal a los 56 años. Dirigentes de la oposición venezolana aseguran que no recibió la atención médica necesaria por sus problemas de salud.
Alfredo Díaz, ex gobernador del estado venezolano Nueva Esparta, murió en la prisión de El Helicoide, donde se encontraba recluido como preso político del régimen de Nicolás Maduro desde hace más de un año. El fallecimiento del dirigente de 56 años bajo custodia estatal fue dado a conocer este sábado por su partido Acción Democrática y por figuras de la oposición venezolana.
"Lamentablemente nos ha dejado un gran compañero, amigo, un hombre humilde conectado con su pueblo, un excelente gobernante que llevó desarrollo y crecimiento a los pueblos de su estado Nueva Esparta", indicó la agrupación en la red social X. "Se encontraba injustamente detenido en el Helicoide desde hacía más de un año", manifestó en el comunicado.
Lamentablemente nos ha dejado un gran compañero, amigo, un hombre humilde conectado con su pueblo, un excelente gobernante que llevó desarrollo y crecimiento a los pueblos de su estado Nueva Esparta.
Previamente, la activista venezolana Elisa Trotta, que fue representante del gobierno interino de Juan Guaidó en Argentina, había denunciado que el preso político murió en la cárcel.
"Acabamos de enterarnos de la muerte del exgobernador y preso político Alfredito Díaz en el centro de torturas de El Helicoide. Otro inocente asesinado lentamente por esta narcotiranía criminal", escribió Trotta en la red social X.
Acabamos de enterarnos de la muerte del exgobernador y preso político Alfredito Díaz en el centro de torturas de El Helicoide. Otro inocente asesinado lentamente por esta narcotiranía criminal. Ya son más de diez presos políticos que han fallecido en cautiverio del chavismo desde… pic.twitter.com/Cz3G0UXYok
"Ya son más de diez presos políticos que han fallecido en cautiverio del chavismo desde el 28J. Esta barbarie debe parar. Los más de mil presos políticos deben ser liberados, como libre debe ser Venezuela. Tanto dolor no puede seguir aumentando", añadió.
La ONG venezolana Foro Penal también denunció la muerte de Díaz, quien llevaba más de un año preso y "aislado", según dijo el director de la institución, Alfredo Romero, y consignó la agencia EFE.
Las denuncias por falta de atención médica
El dirigente opositor Leopoldo López lamentó su muerte y aseguró que le habían negado la atención médica que pedía desde hace meses. “Llevaba meses solicitando atención médica y se la negaron, lo mataron. Es otra víctima de la dictadura. Su partida nos toca profundamente a quienes caminamos con él y compartimos la lucha por la libertad”, denunció el dirigente de Voluntad Popular.
El ex alcalde de Caracas Antonio Ledezma también se refirió a los problemas de salud que sufría Díaz y afirmó que no había sido atendido correctamente.
"Sabían de sus problemas cardíacos. Sabían que necesitaba atención urgente. Y aun así le negaron la asistencia médica oportuna. No fue una muerte natural: fue otra ejecución silenciosa del régimen", aseguró en una publicación en X.
¡Mataron a Alfredito! Otro crimen más de la tiranía de Maduro. Esta vez, la víctima es un servidor público ejemplar, un hombre que consagró su vida entera a trabajar por su amado pueblo neoespartano. Alfredito fue alcalde y gobernador, pero, por encima de sus cargos, fue un… pic.twitter.com/10MaRv039a
Alfredo Díaz fue concejal, alcalde del municipio Mariño y gobernador del estado insular Nueva Esparta. En noviembre de 2024 había sido detenido después de alertar sobre la crisis eléctrica que sufría Nueva Esparta, que según el régimen venezolano se debía a ataques de la oposición.
"Exigimos su libertad inmediata y el respeto a sus derechos humanos, como lo seguimos exigiendo por todos los presos políticos. Hacer política no es delito", sostuvo en su momento la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la mayor coalición opositora de Venezuela, liderada por la ganadora del Nobel de la Paz, María Corina Machado.
El dirigente había cuestionado también que no se publicaran las actas con los resultados de las elecciones de julio del año pasado, cuando las autoridades electorales dieron como reelecto a Maduro, en unos comicios marcados por acusaciones de fraude. La oposición asegura que el ganador fue su candidato, Edmundo González Urrutia, que es considerado presidente electo por Estados Unidos y otros países.
La semana pasada, Amnistía Internacional denunció que Díaz cumplía un año "detenido arbitrariamente por su perfil político". "Fue sometido a desaparición forzada durante 4 días desde que fue detenido. Hoy sigue injustamente recluido en El Helicoide. ¡Exigimos a Nicolás Maduro que lo libere ya!", señaló la organización de derechos humanos en X.
#Venezuela: Alfredo Díaz cumplió un año detenido arbitrariamente por su perfil político. Fue sometido a desaparición forzada durante 4 días desde que fue detenido. Hoy sigue injustamente recluido en El Helicoide.
— Amnistía Internacional Américas (@AmnistiaOnline) November 25, 2025
La represión política en Venezuela
En medio de la tensión con Estados Unidos, el régimen de Maduro endureció la represión política en Venezuela en las últimas semanas. Según cifras de la ONG Foro Penal, entre el 15 de septiembre y el 27 de octubre, el gobierno sumó 52 nuevos presos políticos, alcanzando un total de 875. La intensificación de los mecanismos de control incluye, además de las detenciones arbitrarias, vigilancia digital, enfrentamiento con la alta jerarquía eclesiástica y el reforzamiento de la militarización.
Un elemento central en el patrón represivo es la arbitrariedad de las detenciones. El 3 de noviembre, la ONG Justicia, Encuentro y Perdón alertó sobre "un preocupante aumento de detenciones efectuadas por cuerpos de seguridad del Estado en distintas regiones del país, sin información pública suficiente sobre las causas, las circunstancias o el paradero de las personas privadas de libertad".
Protesta de familiares frente a cárcel de Tocuyito - EFE.jpg
El comunicado también advierte sobre la ausencia de notificación oficial, el desconocimiento de los centros de detención y la negativa de acceso a abogados, lo que configura, según la ONG, un patrón de desapariciones forzadas de corta duración y detenciones arbitrarias, expresamente prohibidas por el derecho nacional e internacional.
"Exigimos de manera urgente que las autoridades nacionales garanticen la información inmediata y veraz sobre la identidad, el paradero y la situación jurídica de todas las personas detenidas, así como el acceso irrestricto a abogados de confianza y la posibilidad de comunicarse con sus familiares, conforme a lo establecido en la Constitución", añadió el comunicado.
La estrategia de control y disuasión del régimen también se expresa en el uso de herramientas tecnológicas como VenApp, una aplicación originalmente diseñada para reportar fallas en servicios públicos, pero que ahora se perfila como un instrumento de vigilancia y monitoreo. Maduro explicó que VenApp será una aplicación digital "para que el pueblo de manera segura, esté reportando las 24 horas del día, todo lo que ve, todo lo que oye para seguir ganando la paz, la tranquilidad. Es una idea maravillosa".
La cárcel de El Helicoide
El Helicoide es una edificación construida en 1950 para ser un moderno centro comercial en Caracas, pero que tras su abandono se convirtió en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin).
Cárcel de El Helicoide - AP
El Helicoide es la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin)
AP
Rodeado de viviendas precarias, el aspecto ruinoso de El Helicode adquirió un aura siniestra para los venezolanos. Entre 2014 y 2017, jóvenes y miembros de partidos políticos salieron a las calles a protestar contra el gobierno. Las fuerzas de seguridad arrestaron a más de 3.000 y muchos de ellos fueron recluidos en sus salones y escaleras, convertidas en celdas improvisadas, en pésimas condiciones.
La palabra tortura se incorporó a la historia de El Helicoide. En mayo del año pasado, el Centro de Estudio de las Sociedades Abiertas Contemporáneas (Cesco, por sus siglas en inglés), con el apoyo de la Fundación Friedrich Naumann Argentina y Atlas Network, presentaron un documental que recoge testimonios de tres ex presos políticos que estuvieron recluidos allí. Los relatos son de golpes, amenazas de violación, uso de electricidad, asfixia con bolsas, intimidación con armas de fuego, entre otros tratos crueles.
En octubre del año pasado, la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos de las Naciones Unidas sobre Venezuela publicó un informe que documenta la violación a los derechos humanos por parte de “las fuerzas de seguridad y los grupos civiles armados progubernamentales antes, durante y después de las controvertidas elecciones presidenciales de julio”.
“Estas violaciones incluyen detenciones arbitrarias, tortura, desapariciones forzadas de corta duración y violencia sexual, que se llevan a cabo como parte de un plan coordinado para silenciar a las personas opositoras o percibidas como tales”, dice el texto.
