Contexto
¿Por qué el oro alcanzó un nuevo máximo histórico?
El auge del oro está principalmente impulsado por las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos reducirá las tasas de interés, lo que haría que los metales preciosos, que no generan rendimientos por intereses, sean más atractivos en comparación con otros activos financieros. Además, la creciente incertidumbre económica y política global, particularmente los riesgos geopolíticos y las tensiones internas en EEUU sobre la independencia de la Fed, están motivando a los inversores a refugiarse en el oro.
¿Qué ocurrió en la Fed?
Trump ha cuestionado en varias oportunidades al jefe de la Fed, Jerome Powell, y la semana pasada dijo que quería despedir a la gobernadora Lisa Cook, por considerar que hizo declaraciones falsas al momento de solicitar hipotecas. Cook, la primera mujer negra en formar parte del órgano rector del banco central, llevó el caso a la justicia para impedir su salida del cargo. Esto se produce en medio de la presión que viene ejerciendo el presidente sobre la Reserva Federal, que históricamente ha sido independiente, para que baje las tasas de interés.
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Lisa Cook junto a Jerome Powell, presidente de la Fed
¿Qué llevó a que el oro registrara niveles tan altos en el último tiempo?
El oro suele ser refugio para los inversionistas en tiempos de incertidumbre. En lo que va del año, este metal precioso aumentó su valor en un 32%, en un contexto de incertidumbre geopolítica por las guerras en Ucrania y Gaza, así como la turbulencia provocada por los aranceles de Trump a los productos de prácticamente todos los países.
Cómo sigue
"La recuperación del oro se verá muy influida por el grado en que la trayectoria de recortes de tipos de la Fed se ajuste a las previsiones del mercado", afirmó Han Tan, analista jefe de mercados de Nemo.money, a Reuters. Según la herramienta FedWatch de CME, los operadores están valorando actualmente en un 90% la probabilidad de que la Fed recorte los tipos de interés en 25 puntos básicos el 17 de septiembre. Los inversores esperan ahora los datos sobre el empleo no agrícola en EEUU que se publicarán el viernes para determinar la magnitud de la esperada bajada de tipos de la Fed.