A pesar de las semejanzas superficiales, los recuerdos falsos no configuran un síntoma de delirio propio de la enfermedad de Alzheimer.
Así lo señaló el estudio de asociación liderado por la titular de la división de Psiquiatría de la University College de Londres, Emma McLachlan.
El análisis publicado en la revista JAMA abordó la incógnita entre la aparición de ambos fenómenos. "Estos hallazgos sugieren que los delirios que experimentan las personas con enfermedad de Alzheimer no surgen como consecuencia directa del olvido o la mala memoria y respaldan aún más la existencia de un mecanismo transdiagnóstico para la psicosis", amplió el informe.
El estudio de carácter transversal se ejecutó sobre un total de 728 participantes integrantes de la Iniciativa de Neuroimagen de la Enfermedad de Alzheimer (ANDI) a quienes se les diagnosticó la dolencia. "Durante el seguimiento, el reconocimiento falso no se asoció con la presencia de delirios al tener en cuenta las variables de confusión", sumó.
Con una edad media de 74,8 años, sólo 42 pacientes de la nómina de evaluados con delirios tuvieron tasas altas de reconocimiento falso, mientras que 549 no expresaron tal fenómeno.
"El reconocimiento falso no se asoció con la presencia de delirios cuando se incluyeron variables de confusión en modelos de regresión logística binaria. Tampoco hubo superposición entre las ubicaciones asociadas con el reconocimiento falso y las asociadas con los delirios", detalló la investigación en su apartado de Resultados.
¿Cómo se midieron los recuersos falsos?
Dos medidas de conducta que se completaban rutinariamente en las visitas de ADNI incluían una medida de recuerdos falsos: la Escala de evaluación de la enfermedad de Alzheimer de 13 ítems, subescala cognitiva (ADAS-Cog 13) y la Prueba de aprendizaje auditivo verbal de Rey (RAVLT).
La primera incluyó una tarea de reconocimiento de 2 palabras objetivo y 12 distractoras. Las respuestas positivas a los distractores (puntuación máxima de 12) se utilizaron como índice de recuerdos falsos.
La segunda, en tanto, consistió en una tarea de reconocimiento de 15 palabras objetivo y 15 distractoras.
Para ambas instancias, se calcularon la discriminación y el sesgo de respuesta para el reconocimiento falso. Para ambas instancias, se calcularon la discriminación y el sesgo de respuesta para el reconocimiento falso.