Entusiasmado, Pelusso le comentó a este periodista en 2008 que en los juveniles de Nacional había un jugador espectacular, “una pantera del área” lo definió el entrenador. Hablaba de Santiago García.
Cuando tuvo la oportunidad de incluirlo en el equipo, lo hizo. En la final de la Liguilla 2008 contra Defensor Sporting, debido a que Bruno Fornaroli había sido operado de apendicitis, de que Richard Morales estaba suspendido (por tirarle la camiseta a los hinchas de Peñarol durante el clásico) y a que Diego Vera se lesionó a los 19 minutos, entró el Morro.
Nacional ganó 1-0 con un gol suyo. Fue la presentación en sociedad del delantero que entonces tenía 17 años.
En la temporada siguiente (2008-2009) Pelusso le dio continuidad. García disputó 38 partidos y terminó como goleador del equipo con 13 goles.
Pero también, cuando tuvo que darle un tirón de orejas, lo hizo. El Morro no empezó bien el Clausura 2009 y en la quinta fecha el técnico lo hizo jugar un partido en Tercera división. García marcó dos goles ese día.
Después regresó al plantel principal y terminó una gran campaña, siendo titular en cuatro de las cinco finales contra Defensor Sporting.
Este año García volvió a Nacional después de jugar en Brasil y en Turquía. Pero no rindió lo esperado, disputó ocho partidos y no marcó goles. En las últimas cuatro fechas no jugó.
Tanto Pelusso como el PF Javier Carballo lo conocen bien y pueden ser de gran ayuda para que despierte la pantera.
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