¿Qué tan pet friendly es Montevideo?

Los sitios dedicados a las mascotas son cada vez más comunes; el crecimiento se justifica por un cambio cultural que coloca a los animales en un lugar preponderante en las familias

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22 de febrero de 2020 a las 05:00

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Hace no tanto tiempo las mascotas tenían un lugar mas bien secundario en los hogares. Aunque siempre existieron esas familias que ponían un plato más para que el perro cenara en la mesa, no era lo más común.

Sin embargo con el paso de los años el lugar y el rol de los animales en las casas fue tomando otra dimensión. Adopciones responsables, cuidados con veterinarios especializados y con homeópatas, juguetes de todo tipo y color para entretenerlos y hasta camas y almohadones personalizados para su confort.

Pero además de todo eso, en Montevideo también se ve el cambio, lento, muy lento, pero cambio al fin, en la posibilidad de que las mascotas participen de otros momentos de la vida de sus humanos.

Por ejemplo, que un perro recorra los percheros de una tienda de ropa con sus dueños es una escena que, ahora, se puede ver en Uruguay. Los animales también pueden ir de paseo por el atrio de la Intendencia de Montevideo y en la capital son cada vez más los locales que los reciben, entre ellos Sinergia Design, Sodimac, Divino, Recicla Secondhand y Urban haus (en su local de la rambla). Las apuestas a la tendencia pet friendly no solo pasan por tiendas, sino que también cafeterías y restaurantes empiezan a sumarse. Además en algunos hoteles y bungalows se puede hacer la reserva para hospedarse con animales. 

No hay normativa que fiscalice esta práctica, tampoco una que la prohíba, y por eso la decisión queda encomendada a los empresarios y a los dueños de los animales. “La ley solamente regula el espacio público, donde el perro tiene que ir con correa y collar. En un espacio privado no hay regulación, sino que el dueño del local que permite el ingreso, es por ahora el responsable de la regulación”, indicó a El Observador Julio Pintos, gerente de la Comisión de Tenencia Responsable y Bienestar Animal (Cotryba).

Reglas y voluntades

En este tema las opiniones son diversas. Hay quienes consideran que los animales deberían tener libertades mayores, y quienes advierten sobre los peligros o las incomodidades que esto podría generar.

Juan Echeverría, uno de los directores de Animales Sin Hogar (ASH), aseguró que “no hay voluntad política, porque en otros casos se han generado normas claras. En otras partes del mundo los animales circulan por todos lados”, dijo. La ONG que rescata animales tiene un café en el centro, Espacio ASH (18 de Julio 920 esquina Convención), donde se puede ir a iniciar el proceso de adoptar animales y si se avisa, se puede concurrir con su propia mascota.

“Es una cuestión de conveniencia y de sentido común. Creo que podemos trabajar para que los animales circulen libremente, pero si tenés un perro que nunca salió de tu casa claro que se va a poder asustar si va a un escenario nuevo”, explicó Echeverría. Para el director de ASH en Uruguay se está avanzando de forma lenta pero se han dado algunas señales en este camino.  De todas formas, incluso quienes circulan con un perro guía -o en entrenamiento para serlo- aún atraviesan dificultades y no son pocas las veces que se enfrentan a rechazos en distintos ámbitos.

Por su parte, el gerente de Cotryba consideró también que en Uruguay se está dando un cambio cultural, que tiene que ver con la tenencia responsable y con darle otro lugar a los animales, y en su opinión cada vez se irán ampliando los lugares que los reciban, como sucede en otros países. Pero en paralelo a este cambio “positivo”, Pintos señala que son aún son muy comunes los casos de denuncias de maltrato animal y de tenencia no responsable que llegan a la Cotryba.

Ir a comer: convivencia y respeto

La lista de cafés y restaurantes que reciben a los consumidores es muy amplia, y las redes sociales colaboran en la difusión. “Nosotros desde que comenzamos recibimos animales. Con mi socio estuvimos en Australia y allí las personas van a todos lados con su perro, desde al banco hasta a comer. Y como a los dos nos gustan mucho los animales, no fue algo que pensamos mucho. Se dio”, dijo Federico Villagrán, quien junto a Andrés Urioste está al frente de Santana Café (Av Alfredo Arocena 1996). De todas formas, y más allá de la apertura a la inclusión de perros o gatos en este tipo de  espacios, es importante estar atento a todos los clientes. Villagrán explicó que siempre se trabaja con sentido común, y que si detectan una situación que incomoda a alguien se acercan para solucionarlo. “Hay personas a las que simplemente no les gustan los perros. Una vez nos pasó de ver caras raras, y por supuesto nos acercamos al cliente y consultamos si el perro los estaba incomodando”, recordó, aunque se trata de casos aislados.

Y también se ven otras situaciones peculiares. “Tenemos clientes que comparten la comida con sus animales. Un muchacho siempre compra un café con brownie y un croissant, y la comida se la da a su perro”, aseguró Villagrán. Pero un elemento fundamental es la responsabilidad del dueño del animal. “La idea es que exista un criterio, que tu perro no se pelee con otros, que tampoco se le tire arriba a las personas o haga sus necesidades dentro del local”, enfatizó Villagran.

Para uno de los dueños de Che.co.ffee este es también un elemento clave. “Recibimos mascotas con gusto, siempre que no molesten a otros clientes. Por lo general no tenemos problemas, a veces sí con las personas más mayores, pero son excepciones”, explica Ladislav Jelínek. La razón por la que su local es pet friendly es muy sencilla: “Somos amantes de los perros, y además nos da mucha lástima cuando viene un cliente y el animal se queda encerrado en el auto”.

Las ferias de Food Trucks que se realizan en distintos puntos de Montevideo son también ejemplos de lugares a los que se puede ir con mascotas. De hecho muchos de los organizadores incentivan que los dueños lleven a sus perros. Este es el caso de la Montevideo Pop up y Garage Gourmet.

Viajar, lo más complicado

A pesar de la tendencia pet friendly, actualmente en Montevideo las mascotas no pueden poner sus patas sobre taxis ni ómnibus. En el caso de los taxis es más frecuente que los conductores permitan que se suban, pero es algo que no se ve en los ómnibus urbanos. En el caso de los interdepartamentales deben de viajar en la bodega. 

La normativa de la IMM prohíbe expresamente la circulación de mascotas en este tipo de transporte. Los animales habilitados a viajar son solamente aquellos que cuentan con entrenamiento adecuado, así como condiciones sanitarias y de higiene certificadas por la Comisión Honoraria de Bienestar Animal –que emite un carné identificatorio del usuario y el animal- y deben ser perros guías.

Si bien existe la obligación de que los animales lazarillos puedan circular en el transporte público, aún se siguen registrando casos en los que –por desinformación, quizás- conductores no permiten que los perros suban. Estos casos pueden ser denunciados ante la IMM.   

Espacios para perros sueltos

Y en este camino de hacer la ciudad más amigable para las mascotas y sus humanos, y también para quienes no disfrutan de la misma forma de su compañía, Montevideo tiene parques y plazas específicos donde se puede pasear con tranquilidad con ellos. El pasado 8 de enero se inauguró el primer parque canino de la ciudad, ubicado en Rambla Wilson y Bulevar Artigas. El nuevo espacio está abierto todos los días en el horario de 8 a 12 y de 16:30 a 20:30.

De todas formas, hay algunas normas que la comuna advirtió antes de la creación del parque y que se deben cumplir para poder utilizarlo. Primero, los perros deben estar acompañados por sus responsables, que no pueden ingresar con más de dos animales a la vez. Las mascotas que ingresen tienen que tener las vacunas al día y estar desaparasitadas, y los perros grandes o potencialmente peligrosos deben usar bozal.

Además de este parque, existen otros espacios públicos habilitados por la intendencia en cada municipio, en los que los animales pueden tener su lugar de esparcimiento. Están en Ciudad Vieja, en el área de la rambla sur, en Rambla Francia y Pérez Castellano; también en las Canteras del Parque Rodó frente a la Facultad de Ingeniería; en Punta Brava, Rambla Gandhi y Bulevar Artigas y detrás de la pista de Atletismo del Parque Batlle.

Spotify para mascotas

Y como si los espacios libres específicos, la posibilidad de entrar a restaurantes y el lugar preponderante en las familias fuera poco, Spotify anunció el mes pasado que las mascotas podrán contar con su propia lista de reproducción de temas musicales.
Todo surgió con una investigación de la propia empresa, que concluyó que un 71% de los dueños de animales domésticos le ponen música a sus mascotas.
El estudio mostró que el rock clásico suave encabeza la lista de los géneros más escogidos, dado que alrededor del 50% de los dueños de los animales admitieron que era su favorito.
La lista de reproducción para animales estará relacionada con los gustos del usuario. Spotify generó este sitio en particular para armar la playlist a gusto del usuario, y al ingresar se les planteará un cuestionario para saber, entre otras cosas, qué mascota posee y su forma de ser, para ofrecerle un género musical que encaje con el perfil del animal.

Hoteles, cuidadores y Airbnb

En Uruguay empezaron a aparecer desde hace ya un tiempo distintos emprendimientos que buscan atender la situación de las familias que, a la hora de salir de vacaciones, no pueden llevar consigo a sus mascotas.
Se trata de cuidadores o “baby sitter” para gatos que van al hogar para alimentar y jugar con el felino que quedó en su casa, o de hoteles o servicios similares al Airbnb para alojar perros y todo tipo de animales.
Algunos ejemplos son Como en casa, que conecta a los dueños con los anfitriones dispuestos a ocuparse de ellos durante esos días, o Teo the cat, un servicio que cuida gatos a domicilio, o Yellow, que aloja a los gatos mientras sus humanos están fuera del hogar.
También está el hotel para perros Los Castaños, ubicado sobre el kilómetro 34 de la ruta 7, o Felini, el hotel de gatos de Ciudad de la Costa, en la avenida Bullrich.
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