Cómo funciona el mundo de las criptomonedas y cómo empezar a comprar desde Uruguay

“Es un cambio de paradigma increíble”, resume Ignacio Varese, director de BlockBear, una empresa especializada en consultorías de blockchain y docente en la Universidad de Montevideo donde da cátedra sobre la temática.

Si siempre quisiste entender este mundo, pero nunca te habías animado a leer sobre el tema tenés que saber el concepto básico: “Estamos hablando que gráficamente es tener control de tu dinero: ya no depende de ningún gobierno, no está controlada por ninguna entidad central, nadie te lo puede manipular”, indica Varese.

Pero, ¿cómo insertarse en este mundo? ¿cuán rentable es? ¿qué impacto puede tener en mi economía a corto y largo plazo? Todas preguntas para las que no hay una única respuesta.

Operadores de criptomonedas consultados por Cromo aseguran que es indispensable informarse sobre el tema. “Hay que investigar mucho antes de tomar cualquier decisión. Al final, la gente que quiere invertir es porque le falta dinero o quiere tener más por cualquier motivo. Lo peor que le puede pasar es perder todo de un día para otro”, indicó Juan Grunwaldt, uno de los impulsores de ñeripeso, la criptodivisa creada este año por una comunidad de uruguayos.

La tentación de ver que una divisa pasa de valer US$ 30 mil a US$ 60 mil es uno de los hechos que más tienta a más de uno (sucedió con el bitcoin). Pero también los usuarios deben saber que en menos de dos meses también puede bajar US$ 30 mil (también ocurrió con el bitcoin).

Grunwaldt insta a tener una posición "filosófica" y "argumentada" para insertarse en esta tecnología. “Tenés que saber qué es lo que interesa de este mundo. ¿Por qué te estás metiendo?”, comentó. Y dio a conocer diferentes motivos por los cuales la gente puede hacerlo. “Si es para una inversión, si te interesa el mundo blockchain para la descentralización de servicios, si te interesa la parte de ciberseguridad. Cada una de esas aristas merece una atención diferente”, indicó.

El experto asegura que parte de la dificultad de ingresar en este mercado es que la gente no entiende por qué las monedas valen lo que valen. “Cada moneda es un proyecto. Detrás de eso hay gente trabajando para algo, con un objetivo”, indicó. “Hay criptomonedas que valen porque generan aplicaciones descentralizadas, otras valen porque generan cadenas entre blockchains distintas. Hay otras que generan modelos de votación”, agregó.

“Muchos usan el concepto de cripto para especular, para ganar dinero de un día al otro. Existe una gran volatilidad por lo que puede ser que el día de mañana multipliques por 10 lo que hayas comprado o se te pierda el valor por 20”, indicó Ronald Alvarenga, CEO de Inswitch, empresa global de tecnologías financieras.

El experto insta a invertir basándose “en los fundamentos de la economía” y “no en la especulación”. Si hay un tipo de inversión, en base a los fundamentos de la economía es mucho más fácil predecir si esa inversión va a tener un valor en el largo plazo.

Agustina Pérez Comenale, abogada especializada en nuevas tecnologías, es integrante de Montevideo Legal Hackers, un grupo de expertos que analiza el impacto legal de la innovación en general.

“Hay que entender la dinámica. Es muy distinta a la de los corredores de bolsa. En este caso, pasa que alguien lanza un tuit y cambian los números y valores. Hay que entender el mercado antes de ingresar”, indicó. Ocurrió cuando el magnate Elon Musk, fundador de SpaceX,  tuiteó un meme el pasado 4 de junio sobre una pareja que se separa junto con el hashtag bitcoin y un emoji de corazón roto. Esa moneda cayó un 6% inmediatamente luego de que hizo esa afirmación.

Si ya estás decidido en empezar…

Si definiste, leíste y te asesoraste, hay diferentes formas de meterse en este mundo.

La forma principal es tener tu propia billetera de criptodivisas, a partir de lo cual podés empezar a comprar y vender. Hay algunas que son físicas (como si fueran un pendrive) y otras son software (en formatos de aplicaciones en el celular).

En algunas de ellas podés tener varias cripto (bitcoin, ethereum, USDT) y otras de una sola. Por ejemplo, una popular de bitcoin es Muun. El usuario baja la app en iOS y Android y puede administrar sus bitcoins en esa herramienta.

Esta app en particular tiene dos botones: uno para enviar y otro para recibir bitcoins. Si el usuario apreta enviar, le pide que escanee un código QR o que digite un código de texto que le haya pasado un destinatario. Si lo que pretende es recibirlo, puede enviar la foto de su propio código QR o enviar ese texto.

En general, todas las billeteras piden que se respalden. Esta en particular, solicita crear un método de recuperación en caso de que cambies tu teléfono o reinstales Muun. Ese respaldo implica usar tu email y una contraseña. También tiene otros respaldos que buscan darle más seguridad al almacenamiento de tu dinero. Uno de ellos es escribir un código en un papel al que solo vos tengas acceso.

¿Y cómo le coloco criptomonedas?

El usuario puede comprarle a algún conocido que tenga y le transfiera a su billetera digital.

O de lo contrario adquirir en alguna plataforma en internet, ya que en Uruguay no hay casas de cambio dedicadas a este negocio. Cryptofacil, una de las que existían en Uruguay hasta el año pasado, decidió cerrar por problemas de rentabilidad.

Lo que sí puede hacer es hacerse de "criptos" en algunas de las plataformas populares de cambio. Una de las más conocidas es Binance, que empezó a desplegarse en Uruguay con más intensidad en la última semana. Existen otras muy populares como Coinbase, Coinmama o Kraken Pro. Básicamente son “casas de cambio” como se conocen tradicionalmente, pero de criptomonedas.

Grunwaldt aclaró los riesgos de manejar bitcoins en una plataforma como esa: si un día decide cerrar y llevarse el dinero y el usuario no puede reclamar nada. “El usuario no tiene un control real de sus criptomonedas”, agregó Varese. Para tener un control real hay que tener una billetera.

Cómo funciona Binance

En Binance, para empezar a tener un perfil en la cuenta, también toman medidas de seguridad. Entre ellas, se exige colocar el nombre de usuario y una triple autenticación para asegurar que sos el usuario que decís ser.

Para eso, piden que pongas un correo electrónico, tu celular y que te bajes una aplicación de Google llamada Authenticator. A estos tres sistemas se les enviará un código que debe ser pegado en la plataforma. Parece engorroso, pero es la forma de autenticar que el usuario es verdadero.

Con esos datos el usuario ya podés comprar algunas de las decenas de criptomonedas disponibles simplemente utilizando la tarjeta de crédito o débito emitida por el banco del que el usuario es cliente en su país. 

El sistema de autenticación es más grande para hacer transacciones de mayor envergadura. Con la verificación básica de tres pasos ya  se puede retirar el monto equivalente a dos bitcoins diarios (hoy el valor de uno de ellos supera los US$ 39 mil). Si el usuario pretende meterse con cifras más grandes, debe enviar a la plataforma un documento nacional de identificación (pasaporte, cédula o libreta de conducir), además de una verificación facial. Esto le permitirá hacer depósitos de hasta US$ 50 mil y retiros diarios de 100 bitcoins. Binance se toma un tiempo para resolver estas cuestiones.

Rodrigo Delfino, jefe de Operaciones de Efinanzas, una empresa que se dedica al rubro de las criptomonedas, contó que una de las  que más equipara el valor del dólar es la USDT. “Si yo invierto 100 dólares la comisión sería un poco más de 7%, según el convenio que tengas con tu banco, la comisión que éste te cobra, y la comisión que te cobra Binance”, indicó.

El comercio P2P y el riesgo de las estafas

Operadores consultados por Cromo aseguraron que una de las funciones más interesantes que tiene Binance, y el negocio de las criptomonedas en general, es el comercio P2P (peer to peer). Un vendedor que ofrece y un comprador que las desea.

Los expertos en el tema recomiendan que los usuarios les compren a usuarios verificados por Binance: aquellos que han pasado por el mayor proceso de verificación de identidad exigidos por la herramienta. También observar a aquellos que hayan realizado un número relativamente alto de operaciones.

En esta herramienta, el usuario puede elegir, por ejemplo, comprarle una criptomoneda a una persona en pesos uruguayos y que acepten pagos a través de determinada entidad bancaria en el país.

En general, los usuarios que venden les indica a los deseosos de “las cripto” que no aceptarán transferencias de terceros. Es decir, que solo recibirán dinero del titular que solicita esa moneda. “Para liberarte la criptomoneda, el vendedor tiene que tomar el recaudo de recibir el dinero del mismo usuario de Binance”, comentó Delfino.  Ese recaudo lo toma pidiéndole una videollamada al vendedor y mostrándole la cédula de identidad.

Una vez que el usuario hace la transferencia de banco a banco, el vendedor libera el monto y llega a la cuenta digital del comprador en Binance.

¿Qué pasa si el vendedor recibe menos dinero del que acordaron? “El vendedor puede apelar a Binance. De esa forma, el comprador tiene que justificar por qué mandó lo que mandó. Y en ese proceso Binance interviene. Muchas veces está saturado porque hay muchas personas que están usando la plataforma”, agregó Delfino.

En este sistema hay que estar alerta a las estafas mediante triangulaciones. El estafador, que dice ser dueño de criptomonedas, le dice al comprador: “Pasame fotos de tu cédula y girame plata uruguaya a esta cuenta”. Al final se queda con el dinero y no libera las criptomonedas.

La abogada Pérez Comenale aseguró que al grupo de abogados especializados en tecnologías innovadoras le llegan muchísimas consultas sobre cuál plataforma es la mejor y qué conviene más: si comprar “peer to peer” o comprar criptodivisas con tarjeta de crédito. “Lo bueno de P2P es que te ahorrás comisiones y es más rápido, pero tenés más riesgos y ahí entra el tema de fraudes de triangulación”, comentó.

Delfino contó que hay una cuenta de Telegram llamada Bitcoin Uruguay en donde hay "mucho novato" que cae en trampas. En ese grupo se suelen hablar de fraudes y estafas, de la que Uruguay no es ajeno.