El caso Tabárez aplicado a las empresas: ¿quién debe decidir (y cuándo) el retiro de un líder?

Para algunos, la decisión la deben tomar los directores de las compañías mientras que hay quienes dicen que es una determinación netamente personal. En donde sí hay coincidencias es que el centro debe estar puesto en los empleados, porque ante los cambios de mando son los que más sufren cuando llega el manto de incertidumbre.

Pablo Regent, profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad de Montevideo (IEEM), explicó que más allá de quién tome la decisión, lo importante es que esa persona no quede atada a su cargo por lo que hizo en el pasado.

“Para eso existen los homenajes y los premios. Un líder debe asumir un puesto solo si los desafíos futuros se adecúan a sus conocimientos y experiencia. Es muy grave considerar que una persona quede en el mismo puesto por lo que hizo”, desarrolló Regent.

Si bien los ejecutivos siempre entienden que pueden continuar con su carrera laboral, la responsabilidad de que esto pase será de los directores de las empresas. Para Regent son ellos quienes deben tomar la determinación, sin importar mucho lo que considere el líder.

Para el profesor del IEEM, que sea exlclusivamente la propia persona que decida cuando retirarse del puesto de liderazgo es un “error grueso”. Siguiendo con el caso de Tabárez, Regent opinó que la decisión debe estar en manos de los directivos de la AUF.

“En las empresas pasa lo mismo. No hay que enojarse con los gerentes, hay que enojarse con los directores”, sostuvo. Agregó que esta es una confusión que suele haber en el empresariado uruguayo, que provoca consecuencias negativas sobre todo para los empleados.

María Laura Volpi, experta en gestión humana, comentó que las empresas multinacionales tienen un marco regulatorio que indica el retiro de los líderes. Sin embargo, en las compañías más pequeñas es donde suele haber mayores roces a la hora de designar un nuevo gerente.

Si bien depende de cada caso, una de las trabas en las empresas familiares es darle el paso a las nuevas generaciones. Volpi recomendó que lo mejor es que alguien externo pueda decidirlo, para tratar de que el “sufrimiento” se minimice.

En cuanto al sustituto, tanto Regent como Volpi explicaron que lo mejor es encarar una transición ordenada. De igual modo esto no siempre se da, porque depende de la disponibilidad que tenga quien se retira.

El hecho de tener claro cuándo es hora de dar un paso al costado, permite ganar tiempo e ir preparándose para cuando llegue el momento. Si bien esto no es tarea sencilla, las grandes empresas a nivel mundial lo están aplicando.

“Viene una persona externa, con potencial y va preparando a la persona para cuando llegue ese momento”, explicó Volpi.