El cine sobrevivirá al apocalipsis pandémico

Todos los mejores finales felices tienen un giro en la trama. Así ocurre en el negocio del cine en la vida real. Los cines golpeados por cierres forzosos, los consumidores nerviosos que se han quedado en casa y los estudios de Hollywood que han retrasado los estrenos de los grandes éxitos de taquilla de los que dependen, esperaban que las drogas milagrosas pudieran salvarlos de la extinción. Las buenas noticias sobre las vacunas contra el coronavirus hicieron que las acciones de grupos de cine cargados de deudas como AMC, Cineworld y Cinemark se dispararan recientemente. Pero se desplomaron la semana pasada después de que Warner Bros dijo que estrenaría sus películas en EEUU el próximo año simultáneamente en los cines y, durante un mes, en su servicio de streaming HBO Max.

La movida de Warner Bros es la más dramática hasta ahora realizada por un estudio de Hollywood para romper con el libro de jugadas habitual para los lanzamientos de los grandes éxitos de taquilla y llevarlos más rápidamente a las salas de estar. Las cadenas de cines han pasado años resistiéndose a los intentos de los estudios de reducir el tiempo en el que pueden ofrecer nuevas películas exclusivamente, y combatiendo las demandas de Netflix de transmitirlas al mismo tiempo. Da un impulso a la visualización en línea y afecta la narrativa de los cines de que, una vez que los lanzamientos de vacunas estuvieran bien avanzados, las audiencias se recuperarían rápidamente, atraídas por una acumulación de éxitos de taquilla como la película de Bond “Sin tiempo para morir”, retrasada de noviembre hasta el próximo abril.

Warner Bros dijo que su movida era parte de un plan de un año que reflejaba la probabilidad de que los cines "funcionarían a capacidad reducida durante 2021". También parece estar diseñada para aumentar las decepcionantes tasas de suscripción de HBO Max, que se lanzó en mayo. De cualquier manera, es un duro golpe para las cadenas de cines. AMC, que también presentó la semana pasada para recaudar hasta US$ 844 millones vendiendo acciones para mantenerlas a flote, dijo que no permitiría a Warner impulsar HBO a expensas del grupo de cine.

Si las vacunas funcionan como se espera, el pesimismo de Warner Bros sobre el tamaño de la audiencia en los cines puede resultar fuera de lugar. El repunte de la audiencia en China sugiere que los espectadores están felices de regresar una vez que se sienten seguros. Los estudios también tienen interés en verlos regresar. Solo las cadenas de cines pueden generar el tipo de ingresos necesarios para hacer viables los éxitos de taquilla que cuestan cientos de millones de dólares.

Podría decirse que Hollywood necesita aún más salas de cine el próximo año, ya que ha acumulado varios estrenos de alto precio. Incluso en la era de la televisión de alta definición, los éxitos de taquilla todavía se hacen para la pantalla grande y se ven mejor en ellas. Los conocedores de la industria especulan que Warner Bros podría revertir su movida con respecto a HBO Max, que enfureció a algunos cineastas, si la vida vuelve a la normalidad para el verano.

Entonces, hay una razón de peso para asumir que los cines sobrevivirán al covid-19, incluso si algunos propietarios endeudados quiebran. Seguramente se encontrarán compradores, que probablemente incluyan compañías de capital privado que están acostumbradas a manejar reestructuraciones similares. Pero el número de cines está destinado a caer, especialmente en el mercado estadounidense con exceso de oferta. Aunque los ingresos globales de taquilla alcanzaron un récord de US$ 42.5 mil millones en 2019, esto se debió principalmente al aumento de los precios de las entradas; los números de audiencia han caído en gran medida desde un pico en 2002.

El equilibrio de poder entre los estudios, que están expandiendo agresivamente sus servicios de streaming, y los operadores de las cadenas de cines también continuará cambiando. Los tres grandes grupos de cine han acordado, recientemente, acortar sus ventanas ferozmente vigiladas para proyectar películas exclusivamente en los cines. Incluso para los éxitos de taquilla, la ventana puede reducirse de meses a semanas. La movida de Warner Bros con respecto a HBO es una demostración de fuerza.

Al igual que las tradicionales películas de desastres de Hollywood, los cines se enfrentan a un enemigo más devastador que cualquiera que hayan encontrado antes. Magullados y ensangrentados, y en números reducidos, lograrán sobrevivir para luchar otro día.