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El Getafe amargó lo que pudo ser una noche histórica para el Atlético
Lo que pudo ser una noche mágica e histórica para el Atlético de Madrid en el Cívitas Metropolitano, fue amargada y empañada por el resultado en menos de cinco minutos. El elenco del Cholo Simeone igualó 3-3 ante el Getafe, por la jornada 18 de LaLiga EA Sports, con 10 jugadores desde los treinta minutos de partido y con el récord alcanzado por Antoine Griezmann, quién igualó a Luis Aragonés como máximo goleador de la historia del club, con 173 anotaciones.
Los dos goles de Griezmann y el de Álvaro Morata no bastaron para que el Atleti se quede con tres puntos que, en los papeles, no lo merecían. La expulsión de Stefan Savic a los 38 minutos de la primera mitad condicionó claramente el desarrollo del encuentro y la mala actuación del equipo local en si, en parte por el rendimiento del Getafe. Borja Mayoral en dos oportunidades y Oscar fueron los autores de los tantos visitantes.
Fue una muy mala actuación del cuadro de Madrid, pese a que en un momento estuvo 3-1 por encima en el marcador. Encontró esos tres tantos en jugadas aisladas que tuvieron su mérito por estar en desventaja numérica, pero tampoco convenció cuando estuvo en igualdad de condiciones.
Sufrió mucho en defensa y no transmitió seguridad en ningún momento. También hay que destacar la actuación colectiva del Getafe que ganó en todas las facetas del juego, en todos los mano a mano y llegó siempre con mucho más peligro al arco custodiado por Jan Oblak. En tan solo cinco minutos, los azulones igualaron el encuentro en el cierre del cotejo.
Abrió el marcador Griezmann en el cierre de la primera mitad, luego de un excelente desborde de Marco Llorente por derecha. El español colgó el centro a media altura y apareció el francés para poner el 1-0.
La ventaja no duró mucho ya que Borja Mayoral igualó las cosas al inicio del segundo tiempo, pero minutos más tarde el Atlético encontró agua en el desierto: nuevamente con Llorente como protagonista por derecha, colocó el centro para la aparición de Morata que, de cabeza, puso nuevamente arriba en el marcador a los suyos.
Los de Simeone no merecían la ventaja conseguida en cuanto a méritos, pero así y todo ganaba. Tal es así que, momentos más tarde, una desinteligencia de Damián Suárez provocó el penal sobre Mario Hermoso que Griezmann cambiaría por gol y así igualar el récord de Luis Aragonés como máximo anotador de la historia del Atlético de Madrid, con 173.
El grave error del Atlético fue meterse atrás a aguantar el resultado con 20 minutos por delante y estando en desventaja numérica. Por supuesto que el desgaste físico juega su parte, pero provocó que el Getafe se viniera al ataque.
En este escenario, en el minuto 87 de juego Oscar Rodríguez recortó distancias tras anotar el 3-2 y, exactamente cinco minutos despúes, Rodrigo Riquelme cometió un torpe penal intentando colaborar en la marca: el mediocampista fue el suelo para evitar el centro y el balón impactó en su mano que estaba despegada de su cuerpo y ampliando volumen, por lo que se sancionó la pena máxima y Borja Mayoral cambió por gol y dictaminó el 3-3 final.
Lo que por momentos pudo ser un triunfo valioso, el empate fue un resultado tranquilizador. Terminó sufriendo el Atlético de Madrid e incluso lo pudo perder en el desenlace. Lo cierto es que el cuadro de Simeone suma un punto que no le sirve y se aleja del Girona, pero supera al Barcelona.
