José López y el "robo" de los scones de las monjas

Una monja del convento donde el ex funcionario argentino escondió los bolsos con dinero relató la jocosa anécdota al programa de Jorge Lanata

Tiempo de lectura: -'

04 de julio de 2016 a las 14:00

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 3 45 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 3 45 / mes

La historia de José López y el dinero escondido en el Monasterio de Nuestra Señora del Rosario de Fátima tiene algunos ribetes tan curiosos que parecen salidos de una película, como sucede por ejemplo con el caso de unos scones que López "robo" de la cocina del lugar.

Embed

Según relató Inés, una monja del monasterio entrevistada por el periodista Nicolás Wiñazki del programa Periodismo Para Todos, López llegó al lugar cargado con los bolsos de dinero y preguntó donde podía dejarlos para poder hablar con la monja encargada del monasterio. "Pensé que eran alimentos y le dije que los dejara en la cocina", explicó Inés.

"Los scones estaban arriba de la mesa de la madre, y él se los llevó. Estaba angustiado", explicó ante la pregunta divertida del periodista. La anécdota se puede ver en el video a partir del minuto 15:47.

La mujer explicó también que desde el principio todo le pareció extraño. "Yo en el momento dudé de que no era algo bueno. Me extrañaba la obra y él tenía cara de nervioso, de desorbitado".

Según publicó el portal Infobae, los policías que detuvieron al exfuncionario público también hicieron referencia a la jocosa anécdota de los scones, ya que cuando ingresaron al convento vieron a López que "venía caminando normal, comiendo scones". Incluso les quiso convidar, explicaron los agentes.

CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

Registrate gratis y seguí navegando.