La última chance del Frente de Todos para llegar competitivos al 2023

Hizo falta un domingo eterno para que cerca de las once de la noche, con los mercados golpeando la puerta, se decidiera que Silvina Batakis era la nueva ministra de Economía. Medida que se tomó luego de una charla entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner, que no hubiese sido posible sin la intervención de Estela de Carlotto, titular de la organización Abuelas de Plaza de Mayo. 

Así están las cosas en la coalición oficialista, Frente de Todos, que con esta nueva designación sueña con la posibilidad, una última chance, de llegar competitivos a las elecciones presidenciales de 2023 donde todas las encuestas los dan perdedor.

Alberto Fernández, con la designación de Batakis, abandona el único espacio de control propio que tenía en el gabinete, el área de Economía. 

Lo que se vio el domingo fue el juego del gato y el ratón y para las dos cabezas más importantes del Frente de Todos lo importante era quien llamaba primero. "Querido la Patria está en juego, llamá 500 veces pero hablá con ella y resuelvan esto", le dijo Carlotto a Fernández.

Las negociaciones estaban trabadas y solo pudieron avanzar cuando se dio la charla telefónica a eso de las 19hs y por el lapso de 20 minutos. Los voceros de ambos lados señalaron que fue cordial y allí la vicepresidenta dio su visto bueno a la designación de Batakis. 

La nueva ministra, trabajó para Daniel Scioli en la provincia de Buenos Aires, era su candidata a ministra cuando Scioli compitió contra Mauricio Macri en las elecciones del 2015 y en este gobierno recaló en el Ministerio del Interior, específicamente en el área que trabaja temas fiscales con las provincias. 

El dato de su relación con los gobernadores no es menor: su designación necesitaba de un amplio consenso que iba va más allá de Alberto y Cristina y abarcaba a los jerarcas de las provincias argentinas quienes el domingo a la noche salieron todos a festejar la llegada de Batakis al Ministerio de Economía.

La novel ministra deberá enfrentar la furia del mercado hoy lunes, con las cotizaciones de los diferentes dólares tocando su techo histórico y las reservas comprometidas por el acuerdo con el FMI. En unos días se conocerá el índice de inflación de junio que promete estar por arriba del 5% mensual, acumulando un 80% anual y a fines de julio un nuevo vencimiento de la deuda.

Este lunes el primero en hablar fue el jefe de gabinete, Juan Manzur, quien señaló que el otro nombre que anduvo en todas las redacciones periodísticas, Sergio Massa, seguirá siendo el presidente de la Cámara de Diputados. A Massa, Fernández le ofreció la jefatura de gabinete, el líder del Frente Renovador, fue y vino de la Quinta de Olivos con una respuesta. 

El titular de Diputados le pidió a Fernández el control de la economía, del Banco Central y de la AFIP para acceder al puesto. Esto no paso y lo que era un relanzamiento de un gabinete en crisis terminó con un anuncio de un ministro por Twitter, con errores de ortografía y una conferencia de prensa suspendida porque cuatros manifestantes llegaron a las puertas de la Quinta de Olivos, así es la Argentina.