"Lo amenazó si no lo hacía": la confesión del sicario que baleó al mecánico en Temperley

La confesión de Gonzalo revela que Federico G.B. ideó el plan para asesinar al mecánico con el objetivo de vengarse, alegando que Leonardo había abusado sexualmente de una familiar de Federico. Aunque el sicario no proporcionó detalles precisos sobre la presunta víctima del abuso, afirmó que se trataba de una hermana o sobrina de Federico G.B.

En su declaración, Gonzalo detalló que un día antes del ataque, Federico lo visitó en su casa y le ordenó matar a Micheli bajo amenazas de matar a su familia y parientes si no cumplía. Además, le ofreció dinero por cometer el asesinato y lo mantuvo encerrado para evitar su huida. Federico justificó el crimen no solo con la excusa del presunto abuso sexual, sino también afirmando que el mecánico era pariente suyo.

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Al ser cuestionado por la fiscalía sobre si conocía a Micheli, Gonzalo negó conocerlo directamente, aunque admitió haber ido al menos siete veces a su casa en busca de chatarra, mercadería y objetos descartables. Reveló que el hermano de la víctima sí conocía a su mejor amigo y que incluso vivieron juntos en algún momento. Esto sugiere que, a pesar de la negación inicial, Micheli no era completamente ajeno a la vida del acusado.

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Posteriormente, Gonzalo admitió que "hizo cagadas" al conocer a Federico y fue él quien le proporcionó el arma calibre 22 con la que disparó a la víctima. Confesó que su cómplice también poseía un revólver calibre 38 largo y una caja con municiones.