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Mejora la disponibilidad de soja, cae el precio y eso incide en trigo y maíz
Esta semana trajo una nueva actualización de las proyecciones agrícolas mensuales del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), que continuó mejorando su estimación de la producción estadounidense.
El USDA incluyó una corrección en la proyección de la cosecha de 2020, que fue aumentada de 112,55 a 114,75 millones de toneladas, lo que se tradujo en una mejora del stock inicial de la zafra 2021/22 a 6,97 millones frente a los 4,76 millones del informe mensual de setiembre.
Para esta cosecha corrigió hacia arriba el rendimiento estimado, de 3.403 a 3.463 kilos por hectárea, mayor a los 3.437 kg/ha previstos por los privados.
Con ese cambio, el volumen de la producción estadounidense que se está cosechando actualmente creció de 119,04 a 121,06 millones de toneladas, por encima de los 120,16 millones que esperaba el mercado.
El dato más fuerte es el aumento en el stock final, que a mediados de 2022 se acercará a los 9 millones de toneladas. El stock fue proyectado en 8,71 millones de toneladas, una suba importante respecto a los 5,04 millones de setiembre y de los 8,16 millones que esperaba el mercado.
En cuanto a la oferta sudamericana, el USDA la mantuvo en 137 millones de toneladas para Brasil y para Argentina la llevó de 46 a 46,20 millones.
El mercado reaccionó
La reacción del mercado fue marcadamente bajista, tanto en la tarde del miércoles como en el día jueves, marcando mínimos de este año tanto en Chicago como en los precios ofrecidos al productor uruguayo que llegó a tener US$ 500 disponibles y al cierre de esta semana solo tiene como propuesta US$ 430 por tonelada.
China no está apareciendo en el mercado con los volúmenes que se esperaban, pero sus importaciones se mantienen proyectadas en 101 millones de toneladas.
La baja de la soja arrastró, aunque levemente, a los valores de maíz y al trigo. Esto tiene menos incidencia en Uruguay, ya que en el maíz pesan más variables regionales. En trigo los movimientos en Chicago son más leves.
De todos modos, habrá un buen precio para la ya cercana cosecha de trigo y cebada.
La caída de la soja no tuvo mayor incidencia en la colza, el cultivo estrella del momento, cuya cosecha está empezando y se mantiene sobre los US$ 670 por tonelada.
Los precios del trigo en las referencias de diciembre 2022 mantienen plena firmeza y puede suponerse que a fines del año próximo sostendrán precios cercanos a los US$ 260 por tonelada que tienen actualmente.
En ese contexto de altos precios cabe apuntar la decisión de Argentina de poner un cepo a las exportaciones de maíz que suman a una situación muy tensa entre las entidades rurales y el gobierno, que puede estallar tras las elecciones parlamentarias de noviembre.
En Uruguay se encamina una muy buena cosecha de invierno y hay un buen arranque de los maíces tempranos, todavía con riesgo por las bajas temperaturas nocturnas. Los servicios meteorológicos de Australia y Estados Unidos ratifican un panorama Niña que mantiene un nivel de riesgo relevante sobre los cultivos de verano, cuya siembra se acelerará en noviembre.
También acelerarán durante la próxima semana la siembra los arroceros, que intentarán avanzar todo lo posible este mes para sostener el alto rendimiento del año pasado.
La pérdida de brillo de la soja no opaca por ahora lo que sigue siendo una muy buena perspectiva agrícola.
