Camilo dos Santos

Negligencia policial en el uso de armas: ¿cómo se entrenan los agentes para tirar?

Fiscalía investiga la muerte de una mujer que recibió un disparo "accidental" de su pareja policía

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18 de diciembre de 2019 a las 17:02

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Un policía mató a su pareja de un disparo al manipular su arma de reglamento "de forma accidental", según declaró ante la fiscal de Bella Unión, Silvia Ferreira. Aunque Fiscalía investiga si se trató de un femicidio, hasta el momento las evidencias indican que se trata de un homicidio culposo ante la negligencia del funcionario policial en el manejo del arma.

No es el primer caso en el que un policía mata o hiere a otra persona con su arma de reglamento debido al mal manejo de su herramienta de trabajo. En agosto de este año, un joven fue herido de bala por un funcionario de la Guardia Republicana en el departamento de Canelones, mientras manipulaba el arma, informó El País.

En marzo del año pasado, una policía fue la autora del disparo que mató a un turista brasileño en Pocitos. La funcionaria policial perseguía a un rapiñero que trepó por una reja y el turista, que estaba en un apartamento, se asomó por la ventana y recibió el disparo.

La ley que regula el uso de armas del personal policial establece en su artículo 3° que no deberán "desenfundar, apuntar o disparar un arma de fuego", a menos que crea "que exista un peligro inminente y sea necesario hacerlo para proteger la pérdida de vidas o la integridad física de lesiones graves".

En la Escuela Nacional de Policía los efectivos reciben una formación a través de cinco módulos de seis meses cada uno con 600 horas semestrales, de las cuales 100 están destinadas a técnicas de entrenamiento, en las que los alumnos efectúan 700 disparos con armas policiales.

Diego Battiste

Sin embargo, los mismos policías consideran que esta formación es insuficiente, aunque mejoró con los años. Un oficial que lleva varios años en servicio dijo a El Observador que deberían "saber más" de las armas que manejan, ya que eso se refleja en los accidentes que han ocurrido.

El Protocolo de Seguridad para el uso de armas y municiones en el polígono de tiro establece, entre otras cosas, que el docente deberá "prestar mayor atención en aquellos operadores que demuestren poca idoneidad o mayor dificultad en el manejo de las armas de fuego", no se permitirá circular por el polígono con el arma cargada, debiendo utilizar una zona de descarga y al finalizar se deberá verificar que el arma esté descargada, entre otras recomendaciones.

El director de la Escuela Nacional de Policía, dijo a El Observador en 2018 que desde el primer módulo se enseña entrenamiento con armamentos para actuar en espectáculos públicos, deportivos y hacer allanamientos. 

También utilizan un polígono virtual de escenarios a cielo abierto y en lugares confinados, así se les enseña a los alumnos a trabajar con "munición letal, inocua y en situaciones de visión baja o nocturna".

Al respecto, en aquel entonces el oficial de la Policía consultado por El Observador dijo que es útil para entrenar reflejos pero el disparo del arma es una situación a la que cada uno debe acostumbrarse en la práctica, ya que cuando se pasa "del disparo virtual al real" se nota la diferencia.

Patricia Rodríguez, presidenta del sindicato de funcionarios policiales de Montevideo, dijo a El Observador que hace un año le plantearon al director de la Escuela Nacional de Policía, Henry De León, que el entrenamiento era insuficiente. El jerarca respondió que contaban con instructores nocturnos para que los funcionarios puedan practicar también en ese horario.

La dirigente sindical aseguró que todavía hay “carencias” como las que tienen los policías en el interior, quienes según aseguró no cuentan con campos de tiro con instructores para practicar cuando desean. “Las carencias están sobre todo también teniendo en cuenta que en cada departamento hay realidades diferentes. Esa accesibilidad (de ir a practicar cuando se quiera) no está en el interior”, afirmó.

El Observador intentó este miércoles comunicarse sin éxito con De León, quien no respondió a las llamadas ni a los mensajes.

En tanto, según contó Rodríguez, una vez al año, los agentes policiales deben realizar una reinstrucción sobre el uso de armas, la práctica policial y también en materia jurídica.

Las reglas de seguridad básicas

Pexels

Luis Tartaro, el director de la Escuela Uruguaya de Tiro, explicó cuáles son las reglas de seguridad básicas que debe manejar cualquier persona que porta un arma. Según dijo, las pautas son generales tanto para policías como civiles (ver recuadro).

"El arma no se dispara sola, la podes tirar cargada con cartuchos y balas y no se va a disparar porque tiene cartuchos integrales que funcionan cuando el arma está obstruida", explicó. Y dijo que los errores no son del arma sino humanos. "Esa es la razón por la que nadie tira hasta que tiene un curso de habilitación de polígono que son dos clases, una de revólver y otra de pistola", en referencia a lo que deben hacer quienes quieren aprender a manejar armas a nivel privado.

El agente policial que mató a su pareja -embarazada de 8 meses- estaba en su domicilio preparándose para ir a trabajar, y cuando le colocó el cargador a la pistola de reglamento 9 mm disparó "de forma accidental" una bala que había olvidado en el arma, contó la fiscal del caso a El Observador. En el lugar había dos testigos que vieron el momento en que ocurrió el accidente.

Otro instructor de manejo de armas dijo que lo primero que se debe tener en cuenta es que jamás se debe apuntar a quien no se quiere destruir, no importa si el arma está descargada. "El arma tiene que apuntar a un lugar seguro", explicó, y dijo como referencia que debe limpiarse vacía y desarmada.

Todas las personas que pretendan manejar un arma deben tramitar el Título de Habilitación para Adquisición y Tenencia de Arma (THATA). Se trata de un documento único, válido en todo el territorio nacional, que vincula directamente a la persona con las armas de fuego de su propiedad, que puede ser máximo.

A su vez, el porte de armas es un documento que habilita al interesado a portar un arma de fuego a la vez. Ambos permisos se tramitan ante la Jefatura de Policía del departamento donde reside el interesado.

Las 7 Reglas de oro
Hay siete reglas que los funcionarios policiales y todos quienes tengan permiso de porte de arma deben seguir, que se encuentran disponibles en la página web de la escuela policial.
  1. Tratar a toda arma de fuego como si estuviera cargada, aún a sabiendas que no lo está, hasta que sea verificado por si mismo, mediante verificación visual, táctica y/o mecánica.
  2. Mantener el dedo índice fuera del arco del guardamonte hasta el momento que esté seguro de efectuar el disparo.
  3. No apuntar a nada, ni a nadie que no se le pretenda disparar.
  4. Nunca debe obstruirse el cañón de un arma que vaya a ser disparada, por lo que se debe verificar que el mismo no se encuentre obstruido, antes de disparar.
  5. Queda terminantemente prohibido manipular el armamento sin la presencia del docente de la materia.
  6. Queda totalmente prohibido hablar en la línea de tiro sin la previa autorización del instructor.
  7. Queda terminantemente prohibido la práctica de tiro bajo los efectos del consumo de alcohol y/o drogas.
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