Qué esperar de Argentina y Brasil en 2022: poco crecimiento y encarecimiento en dólares

El informe indica que estas conclusiones se desprenden de la última encuesta de expectativas que realizaron los bancos centrales de los países vecinos: el Relevamiento de Expectativas Macroeconómicas (REM), del argentino y el Relatório de Mercado Focus, del brasileño. En el caso de Argentina, la encuesta, que tiene frecuencia mensual, fue publicada el viernes 6 y en el caso de Brasil, que es semanal, el lunes 2.

Según el monitor de coyuntura de la UCU, en Argentina la economía crecería 3,5% en este año (es decir, entre los promedios de 2021 y 2022), lo que implica una magnitud algo inferior al “arrastre estadístico” heredado del año pasado (4,1%). O sea que no habría de crecer a lo largo del año en curso.

Para la inflación se proyecta una tasa de 65,1%, superior a la del año pasado (50,9%), pero mes a mes las expectativas se corrigen hacia arriba. Finalmente se espera que el dólar oficial cierre el año en AR$ 155, con una variación inferior a la de los precios. De este modo Argentina se encarecería en dólares y mucho más lo haría al considerar al dólar “blue” que hoy presenta una brecha del orden de 70% con el oficial, brecha que al terminar el año pasado era cercana a 100%.

En el caso de Brasil, se espera que la economía crezca 0,7%, apenas por encima del “arrastre” desde 2021 (0,3%), por lo que el crecimiento “propio” de este año sería cercano a cero. La inflación esperada se ubica en 7,9% lo que implica una magnitud inferior a la actual (11,3% en los 12 meses a marzo) que aún no cede a pesar del significativo endurecimiento de la política monetaria. Por último, se proyecta al dólar en BR$ 5,00, dando lugar a una considerable inflación en términos de dólares.

El informe señala que ambos países presentan problemas en sus macroeconomías y también tienen incertezas en el frente político. En Brasil habrá elecciones en este año y, según las encuestas, se han emparejado las chances del presidente Jair Bolsonaro y el ex presidente Lula da Silva. En Argentina, por su parte, está planteada una pulseada dentro de la coalición que gobierna, entre el presidente y la vicepresidenta.

A su vez, el monitor indica que los países vecinos presentan diferentes enfoques en materia de política económica, con Brasil manejándose dentro de la ortodoxia y con Argentina haciendo todo lo contrario, “en un nuevo revival de errores y malas políticas que se han cometido en reiteración real en las últimas décadas”. Esto a pesar de contar con un reciente acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que se hizo, por ambas partes, con resignación y para “aguantar” hasta el próximo cambio de gobierno.