Reabren escuelas rurales: Primaria dice que son 546 y el sindicato que sólo 300 están en condiciones

Mientras la Federación Uruguaya de Magisterio y trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP) estima que unas 300 escuelas están en condiciones de recibir alumnos, el Consejo Directivo Central (Codicen) afirma que son 543. 

La secretaria general de la FUM-TEP, Elbia Pereira, explicó a El Observador que en las reuniones que mantuvo el gremio con las autoridades nunca se manejó la cifra de 543 escuelas. "En reuniones con nosotros no", señaló. Pereira afirmó en la tarde de este martes que no iba a ser posible llegar a ese número para la mañana siguiente.

Uno de los motivos que adujo fue la falta de los resultados de los hisopados realizados a los 150 maestros de las escuelas rurales. La directora general de Primaria, Irupé Buzzetti, señaló a El Observador en la noche de este martes que si bien los hisopados estaban hechos restaba conocer el resultado. 

El gobierno definió a pedido de los sindicatos que se harían hisopados a todos aquellos maestros provenientes de ciudades o localidades que hayan tenido casos positivos de covid-19. Los departamentos con mayor demanda de estudios, detalló Buzzetti, fueron Salto (40), Colonia (47) y Durazno (38). 

Tanto las autoridades como los gremios de la educación llegaron a la fecha fijada por el presidente de la República trabajando a contra reloj para cumplir con todos los puntos del protocolo acordado entre las partes. 

Diego Battiste

Además de los hisopados al personal, también se acordó que las escuelas estén en condiciones edilicias (varias no lo estaban), así como que cuenten con insumos para mantener la higiene necesaria, personal auxiliar para ayudar con las tareas de limpieza y tiques de alimentación para repartir a los padres, ya que los niños en esta primera etapa no comerán en la escuela. 

Si bien el miércoles 8 de abril el presidente Luis Lacalle Pou anunció que 973 escuelas rurales de todo el país, salvo Canelones, abrirían sus puertas, esa cifra bajó considerablemente una vez que los gremios y las autoridades analizaron al detalle la realidad de cada centro. 

Así se llegó a la cifra de 543 que manejó públicamente el presidente del Codicen, Robert Silva y las demás autoridades educativas. También se acordó que las escuelas abrieran tres veces por semana y por no más de cuatro horas. Para esta primera apertura se fijó un tope máximo de 30 alumnos. Mientras que algunas tienen menos de cinco, otras tienen cerca de 15 y otras 30.

Sólo un tercio se conectó

Para el próximo 29 de abril está previsto que el gobierno anuncie la apertura de otras escuelas más que no podrán abrir sus puertas este miércoles. Sin embargo, la FUM-TEP se opone a esta medida y ya pidió una reunión para conocer cuál es el plan, ya que asegura que no fue en consulta con el sindicato. 

Pereira señaló que la FUM-TEP mantiene "inamovible" su postura de que las escuelas rurales no deberían abrir este miércoles, más allá de las medidas fijadas en el protocolo, que lo que busca es que los maestros estén expuestos "lo menos posible" al virus.

 "Nadie puede entender cuál es el objetivo de abrir estas escuelas", afirmó la dirigente, quien remarcó que el gobierno anunció la fecha de inicio sin antes contar con un protocolo que lo respaldara.

El gobierno argumentó desde un principio que la decisión que tomó se basó, entre otras cosas, en la baja conectividad en algunas localidades del interior del país, donde se hizo difícil que los niños continuaran con el proceso de aprendizaje. Otro factor que se ponderó es que el campo no paró sus actividades en medio de la emergencia sanitaria, por lo que muchos de esos niños están solos o ayudando en las tareas a sus padres. 

"El tiempo está pasando, los sectores que tienen menos son los más desfavorecidos y vamos a poner el pie en el acelerador por este tema", señaló Silva en declaraciones a Así Nos Va de Radio Carve este lunes. El Observador intentó contactarse con el presidente del Codicen pero no obtuvo respuesta. 

Buzzetti señaló que los datos de Primaria muestran que de las 973 escuelas rurales que hay en todo el país (y que abarcan a un universo de unos 16 mil alumnos), poco más de un tercio se conectó a las plataformas digitales. 

Camilo dos Santos

Pese a este número, tanto la FUM-TEP como la directora general de Primaria (que mantuvo su cargo de la administración anterior y está a la espera de ser relevada por el nuevo gobierno) destacaron que los maestros rurales apelaron al ingenio en las últimas semanas para seguir en contacto con los alumnos. En varios departamentos las radios locales se volvieron el mejor aliado de los maestros, que aprovecharon a comunicarse con los alumnos y pasar avisos a los padres a través de esas vías. 

Si bien el protocolo se negoció con el gobierno, lo que fue inamovible luego del anuncio del presidente fue la fecha fijada para este 22 de abril. 

"¿Cuál es la necesidad de correr? No lo entendemos todavía", señaló Pereira. "¿Qué ponemos primero? ¿La educación y después la salud?", se preguntó. 

El inicio de clases de manera voluntaria en las escuelas rurales fue una decisión que se tomó al más alto nivel del Poder Ejecutivo y por la cual Lacalle Pou asumió la responsabilidad. La medida forma parte de una apertura gradual que se tomó junto con la decisión de reintegrar a más de 40 mil trabajadores de la construcción. 

Para Buzzetti, que permanece en el cargo desde el gobierno anterior, se trató de una "decisión política" y Primaria lo que debió hacer fue dar "todas las garantías" para cumplir con la orden, sobre todo para llegar a la fecha prevista. No obstante, destacó la "flexibilidad" que hubo para negociar las condiciones, empezando por los días de la semana, el horario y las demás medidas. 

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