Trabajadores de casinos se declaran en conflicto y la sala del Geant permanecerá cerrada

Las negociaciones no dieron sus frutos y, en la operativa, la sala del Geant continuará cerrada, mientras que las demás salas que pararon su actividad en solidaridad con los trabajadores del Geant volverán a su actividad a partir de este miércoles en su horario habitual.

La sala sin aire acondicionado en plena ola de calor fue el principal desencadenante para que los trabajadores del casino ubicado en Parque Roosvelt decidieran avanzar en el conflicto. "Nos ofrecieron levantar la medida y como primera solución mágica de siete a 10 días estarían poniendo unos equipos alternativos de aire acondicionado para mejorar las condiciones ambientales de la sala", describió Píriz y continuó: "los compañeros del Geant resolvieron seguir con la medida hasta que esté listo el aire acondicionado".

En todos los demás puntos referidos a la situación edilicia de la sala se llegaría a un acuerdo una vez levantadas las medidas, "eso va a pasar cuando las condiciones estén dadas", enfatizó el presidente de la gremial de trabajadores.

Las medidas de fuerza que puedan implementar en un futuro serán discutidas en una asamblea que mantendrán durante la tarde. En tanto, Anfuce elevó un planteo para que todas las salas del país sean visitadas y evaluadas por la DGC junto con el sindicato. Esto sucederá también una vez que se resuelva el conflicto en la sala del Parque Roosvelt. 

El conflicto

El pasado domingo 5 de marzo los trabajdores del casino ubicado en Parque Roosvelt y gestionado de forma mixta entre la Dirección General de Casinos y HRU—representante de Grupo Codere en Uruguay—  decidieron dejar sus puestos de trabajo por sus malas condiciones laborales. El principal reclamo radicaba en la falta de aire acondicionado cuyo impacto se veía agravado por la ola de calor que azota el país. 

"También está el estado lamentable del local, de las condiciones de trabajo: se llueve la sala, no se proveen los repuestos para las máquinas ni se renueva el parque de máquinas que por contrato debe renovarse un 5% cada dos años", describió Piriz y sostuvo que la empresa privada no ha cumplido con estas condiciones en ninguna de las salas que la empresa HRU comparte con el Estado.

Fuentes de Codere Uruguay dijeron a El Observador que en atención al conflicto que están llevando adelante los funcionarios en la sala de Parque Roosevelt, el viernes 3 de marzo representantes de la empresa junto con autoridades de la Dirección General de Casinos se hicieron presentes en el lugar a fin de evaluar las condiciones térmicas de la sala. Luego del análisis, se concluyó que las condiciones eran adecuadas para la correcta realización de las tareas, labrándose un acta notarial en la que se dejó constancia de los registros observados.

En esa oportunidad, los representantes de la empresa transmitieron a las autoridades de la DGC su disposición a colaborar en lo que esté a su alcance, a efectos de alcanzar un acuerdo.

Según el dirigente sindical, la responsabilidad de las condiciones de las salas es de la empresa privada y es competencia de la Dirección General de Casinos controlar y fiscalizar el estado de las salas, y aclara que los funcionarios no están solicitando ninguna prestación ni aumento salarial. "Todo tiene que ver con las condiciones laborales y  el público", enfatizó el presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios de Casinos del Estado.