Marcelo Morillas

Voz cascada, insomnio y euforia: las señales del cansancio en los candidatos

Las recorridas por el país de los presidenciables comienzan a pasarles factura

Tiempo de lectura: -'

22 de octubre de 2019 a las 05:03

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 3 45 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 3 45 / mes

Si hay algo en lo que todos los candidatos coinciden es en las pocas horas de sueño que tienen en estos últimos meses. Conforme se acerca el 27, el descanso es aún menor. La agenda de recorridas, giras, entrevistas, visitas a organizaciones y actos les consumen las hora del día y el cansancio se hace inevitable.

Luego de la Convención del Partido Nacional del 10 de agosto, Luis Lacalle Pou y Beatriz Argimón comenzaron giras por Montevideo y el interior por las que prácticamente dieron tres vueltas enteras al país. Este miércoles culminarán la última en la que recorrieron capitales, con un acto de cierre de campaña en Las Piedras. En estos dos meses y medio, fueron dos veces a cada una de las capitales departamentales, visitaron localidades pequeñas, dieron más de 200 discursos y saludaron a militantes en decenas de locales partidarios en la capital. En total, llevan recorridos unos 35 mil kilómetros, según los cálculos del comando de campaña.

La fórmula frenteamplista no se queda atrás. Aunque tuvieron menos salidas al interior, la agenda de Daniel Martínez y Graciela Villar tampoco tuvo lugar para el descanso. El candidato del oficialistmo, junto a su compañera, intensificó las salidas por distintos barrios de Montevideo en setiembre y octubre, y también las recorridas por localidades y capitales del interior, en algunas de las que llegó a coincidir con los blancos. En su comando, calculan que Martínez recorrió unos 12 mil kilómetros, de los cuales 9.000 los hizo en el ómnibus “de la ola esperanza”.

Natalia Gold

Ernesto Talvi, en tanto, comenzó la campaña de cara a las elecciones nacionales con una agenda cargada de actos y recorridas que debió interrumpir de golpe por un pinzamiento de columna que le obligó a hacer reposo durante más de dos semanas.

Señales de agotamiento

En los últimos días de la campaña hay algunas señales que denotan el agotamiento de los candidatos aunque siguen adelante hasta el jueves, último día antes de que comience la veda electoral que se suspende con la apertura de las urnas el domingo.

En el candidato del Partido Nacional por ejemplo, el cansancio se manifiesta en el estado de su voz. Las horas de discurso le empiezan a pasar factura a la garganta. “Me van a tener que bancar porque me estoy quedando sin voz, les voy a pedir que hagan silencio”, dijo este sábado a la noche en un acto en Maldonado. Lacalle Pou venía de horas de tensión y de tristeza por el episodio de los audios del intendente de Colonia, Carlos Moreira, quién terminó renunciando al partido justo mientras el candidato hacía uso de la palabra.

“Alguno nos ve con la voz que ya está cascada y, como nos quiere y nos tiene confianza, nos dice: ‘Qué cara de cansado que tenés’. Y puede ser que tenga razón, pero no saben la energía interna que tenemos que nos la generan ustedes”, agregó minutos después. Antes de ese acto, el candidato blanco había estado más de una hora en la caja de una camioneta saludando a una caravana de casi 15 kilómetros que organizaron los maldonadenses. El mismo sábado horas antes había estado en Rocha en una caravana de más de tres kilómetros, que terminó en un acto en ese departamento.

Natalia Gold

Las fotos y autógrafos son un clásico de la campaña y la cercanía con los militantes no mermó pese a que los últimos actos son más masivos que aquellos que se realizaban en localidades pequeñas. Lacalle Pou llega a una capital departamental y saluda a todos los posibles votantes que se le acercan, se saca una selfi y sigue caminando intentando llegar al escenario. Cuando termina sus discursos se baja del escenario y decenas de personas lo rodean para pedirle más fotos y que le firme banderas o libros.

Natalia Gold

Algo similar le pasa a Martínez. Los frenteamplistas se le abalanzan cuando termina de hablar lo que hace interminable cada jornada. En muchos casos, el chofer que maneja la camioneta en la que se mueve debe encender el motor en señal de retirada para apurarlo.

Otra cosa en común que tienen los dos candidatos con más chances de llegar al balotaje, es que siempre los acompaña una botella de agua. Lacalle Pou la tiene siempre cerca cuando habla para darle un respiro a su garganta. A veces la tiene que reforzar con un poco de jarabe para la tos que le suavice la voz.

Martínez la usa también como forma de refrescarse. En algunos actos se ha tenido que mojar la cabeza por el calor y la intensidad de la jornada.

Comando de Daniel Martínez

Este lunes, entrevistado en radio Sarandí, Martínez dijo que quedaron más de 170 entrevistas que no pudieron concretar por falta de tiempo. También dijo que la adrenalina que le genera el ritmo de la campaña le dificulta poder dormirse y bromeó con que se tiene que “pegar tres sopapos” para que el sueño llegue.

La emoción también es una señal del cansancio acumulado. Martínez se quiebra con más facilidad que cuando empezó sus recorridas y de vez en cuando, esa emoción se traduce en llanto.

Aunque nunca lo ha dicho de esa manera, es probable que algo similar le pase a Lacalle Pou. En sus últimos actos suele repetir que la cercanía con el día de la elección hace que el corazón “explote afuera del pecho”. Para el candidato, están en lo cierto quienes dicen que para el 27 “no falta falta” o los que aseguran que “falta una vida”, porque “cada día se vive con más pasión y pulsaciones”.

CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

Registrate gratis y seguí navegando.