La Justicia estadounidense publicó sus hallazgos de la investigación por la muerte de Prince, el artista y compositor muerto en abril de 2016 a los 57 años. La fiscalía presentó el reporte en el que se señala la causa definitiva de muerte del músico, que fue una sobredosis accidental de analgésicos.
Los medicamentos en cuestión eran de la marca Vicodin, pero falisficados. El Vicodin contiene opiáceos como el fentanilo, un componente que elimina el dolor y tiene un efecto similar al de la morfina, solo que mucho más potente.
"Esas pastillas falsificadas contienen un opioide potencialmente mortal, el fentanilo", explicó el fiscal Mark Metz,
encargado de la investigación. "No hay evidencia de que Prince supiera que estaba consumiendo fentanilo, y tampoco de que las personas del entorno de Prince supieran que él tenía pastillas falsificadas que contenían fentanilo".
A raíz de esos hallazgos, la Justicia decidió que no se presentarán cargos contra ninguna de las figuras investigadas, aunque Michael Schulenberg, el médico de Prince, que le recetó los opioides una semana antes de su muerte, ha pagado la multa correspondiente a haber firmado una receta ilegal.
Schulenberg recetó sustancias controladas a nombre de un paciente, sabiendo que esos medicamentos iban a ser tomados por otra persona, en este caso Prince, y por eso debió pagar US$ 30.000.
A pesar de eso, el médico niega haber tenido responsabilidad en la muerte del ícono musical, y así lo juzgó la fiscalía, que no tuvo evidencia suficiente para señalar a quien le facilitó a Prince los medicamentos que lo mataron. "Es muy probable que Prince no supiera que estaba consumiendo pastillas falsificadas que lo podían haber matado.