Melina Furman, una destacada investigadora y referente en educación en el mundo hispanohablante, falleció a los 49 años tras luchar contra un cáncer de colon. Durante su carrera, trabajó en la Universidad de San Andrés (UdeSA), en el CONICET, y dejó un valioso legado a través de sus libros y sus conferencias TEDx, que han inspirado a miles.
La noticia de su fallecimiento fue difundida a través de un comunicado oficial por el Proyecto Educación y Nuevas Tecnologías de FLACSO Argentina, en el que se expresó apoyo a sus seres queridos y colegas: “Es imposible ‘despedirse’ de alguien que estará siempre tan presente, con un legado que es una fuente infinita de inspiración”, expresaron.
A pesar de su enfermedad, que la afectó durante dos años, Melina no dejó de impulsar proyectos dedicados a fomentar la curiosidad, el pensamiento crítico y la creatividad en personas de todas las edades. Su compromiso con la educación fue inquebrantable hasta sus últimos días.
La trayectoria de Melina Furman
Melina tuvo una formación académica notable. Estudió en el Colegio Nacional de Buenos Aires y en la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, donde obtuvo su licenciatura en Biología. Posteriormente, completó un posgrado y un doctorado en Educación en la Universidad de Columbia, en Nueva York. Esta sólida formación le permitió especializarse en la didáctica de la ciencia, ganándose reconocimiento internacional en esta área.
Como investigadora del CONICET, y en colaboración con diversas organizaciones como Unicef y la UNESCO, Furman contribuyó de manera significativa al ámbito educativo en América Latina. Su enfoque en la teoría del aprendizaje la llevó a desarrollar la idea de que "cualquier persona puede aprender cualquier cosa si se le enseña de la manera adecuada", una visión inspirada en Jerome Bruner, pedagogo y psicólogo estadounidense, que ella adoptó en sus trabajos.
Entre sus publicaciones más recientes se encuentran tres ensayos que abordan este enfoque educativo. En 2018 publicó "Guía para criar hijos curiosos", seguido de "Enseñar distinto: Guía para innovar sin perderse en el camino" en 2021. Su obra más reciente, "Curiosidad Extrema", la presentó en la Feria del Libro de abril de 2023, coescrito junto a sus hijos mellizos Ian y Galo, de 11 años. Este libro trata sobre "Experimentos para entrenar los super-poderes de tu cerebro", reforzando su legado de promover el pensamiento crítico desde la infancia.
Furman también dejó pendientes algunos proyectos, como un ensayo sobre la idea de "aprender liviano", que abordaba cómo disfrutar aprendiendo nuevas habilidades de manera eficiente, algo que ella misma experimentó recientemente con el crochet.
Su influencia en el ámbito educativo fue ampliamente reconocida, tal como lo demuestran encuestas realizadas a cientos de docentes en la región. En una próxima publicación de Axel Rivas, colega de Furman en la UdeSA, se destaca que ella fue la autora más mencionada como referente para mejorar las prácticas educativas.
Conocida por su habilidad para abordar temas complejos y presentarlos de forma accesible, Melina era capaz de redactar investigaciones técnicas y al mismo tiempo crear contenido simple y atractivo para audiencias diversas. Fue la oradora que más conferencias dio en TEDx, y a pesar de su enfermedad, co-condujo su última edición junto a Diego Golombek en el Movistar Arena.
A lo largo de su vida, Melina lideró numerosas iniciativas para mejorar los procesos de aprendizaje, trabajando tanto con gobiernos como con organismos internacionales. Además, fue cofundadora de los Clubes TED Ed, donde también dejó su huella.
Los sentidos mensajes por la partida de Melina Furman
Gerry Garbulsky, director de TED en español y cofundador junto a Furman de "El Mundo de las Ideas", compartió un emotivo mensaje en redes sociales: “Gracias por ser mi amiga del alma. Gracias por todo lo que tramamos juntos. Gracias por todo lo que se hizo realidad. Gracias por las risas y los abrazos. Gracias por enseñarme tanto. Gracias por tu legado, que ya es enorme y ahora va a volar más alto todavía. Meli, te voy a extrañar horrores. Tristeza infinita”.
Garbulsky también resaltó la capacidad única de Furman para combinar una profunda inteligencia con un entendimiento sensible de las relaciones humanas. Según él, su impacto no solo fue significativo en quienes la rodeaban, sino también en aquellos que leyeron sus libros, asistieron a sus clases o vieron sus charlas TED. Como muchas de las personas que la siguieron fueron docentes o padres, su influencia se multiplicó exponencialmente.
Para Axel Rivas, su partida es una pérdida irreparable: “Se va una persona tremendamente admirada y querida, que deja una huella única en esta disciplina. Se nos va alguien irreemplazable”.
Sus amigos y colegas recuerdan su energía y sentido del humor. Durante un tratamiento en China, escribió junto a su esposo, Fabio Tarasow, un blog sobre sus vivencias, mostrando siempre una sonrisa a pesar de las dificultades.
Melina Furman falleció en el hospital Fleming, rodeada de su familia y seres queridos. Antes de partir, compartió unas palabras con una amiga: “Tuve una vida hermosa. Me hubiera gustado acompañar más tiempo a mis hijos, eso seguro; pero me voy tranquila porque sé que tienen la mejor red de contención”.