El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, subió el tono sobre la difícil situación por la que atraviesa el PSOE, especialmente a raíz de los recientes escándalos que involucran a altos cargos como Ábalos, Koldo y Santos Cerdán. En una entrevista concedida a la Cadena COPE, García-Page no dudó en señalar que la dirección del partido se encuentra en un "búnker" que parece una "tumba", y advirtió que "queda muchísimo por saberse". Además, destacó que el PSOE atraviesa "el momento más grave de credibilidad en su historia reciente".
"Las informaciones que más le preocupan a Sánchez ni siquiera están hoy en los periódicos" "Las informaciones que más le preocupan a Sánchez ni siquiera están hoy en los periódicos"
"Una bomba racimo"
Page señaló con dureza que los problemas del PSOE van más allá de los titulares actuales, advirtiendo que «queda mucho por saberse». y aludió a posibles revelaciones de figuras clave como Koldo García y Víctor Aldama, quienes, según Page, podrían tener información comprometida, incluidas grabaciones de conversaciones, describiéndolos como una «bomba de racimo». El presidente de Castilla-La Mancha también lamentó que la credibilidad de la dirección del partido se encuentra seriamente cuestionada, asegurando que «muy poca gente cree» en ella. Subrayó que, aunque se alega acoso, el papel de víctima «ya no cuela» y advirtió que el PSOE se encuentra en un «laberinto sin salida» en este crítico momento.
Críticas a la "estrategia de aislamiento" de Sánchez
El presidente castellanomanchego destacó que el jefe del Ejecutivo está "bunkerizado" y depende de los "socios de Gobierno", quienes "más que nada son accionistas", lo que incrementa las dificultades para Sánchez.
Respecto a la carta enviada por Pedro Sánchez a la militancia, García-Page comentó que no sabe si la ha recibido, pero valoró que la estrategia de Sánchez en abril de 2024 fue optar por el "aislamiento" al ser consciente de la gravedad de lo que se venía.
"La solución política en España tiene que venir democráticamente"
En cuanto a una posible movilización interna dentro del PSOE o una moción de censura, García-Page se mostró tajante, asegurando que los diputados de Castilla-La Mancha no apoyarán tal iniciativa "por instrucción suya" y remarcó que "la solución política en España tiene que venir democráticamente".
García-Page: "No voy a estar en silencio"
A pesar de las tensiones internas, García-Page afirmó que no dejará de luchar por el PSOE y que "no va a estar en silencio". Aseguró que, aunque su posición sea incómoda, continuará defendiendo los valores de la socialdemocracia y la unidad del partido, lejos de caer en las disputas internas.