- ¿Qué idea quieres plantear durante tu exposición en el encuentro del Madrid Economic Forum de este fin de semana?
- Yo creo que va a ser claramente el evento económico más importante de Europa. No ha habido un evento similar en cuanto a número de personas y en cuanto al tipo de ponentes, y lo podríamos llamar como un evento que lo que intenta es ser completamente diferente a otros eventos económicos como el Foro de Davos, donde en vez de hablar de libertad económica, de libertad de empresa y de competencia e innovación, pues de lo que se habla es de intervencionismo, de estatismo y de pensamiento único. Entonces, este de Madrid es un foro de pensamiento liberal de libertad y de defensa de los valores de la libertad individual, la libre empresa, la propiedad privada y el fortalecimiento del sector privado como los elementos que generan crecimiento, progreso y reducción de la pobreza.
- ¿Crees que estas ideas se están expandiendo en España, y en Europa, a partir del triunfo de Donald Trump en EEUU?
- Se están expandiendo de manera muy importante las ideas de la libertad. Se están expandiendo claramente por el mundo, pero diría que es el efecto de muchos factores. En las redes sociales, en los foros de opinión, las ideas de la libertad ganan por goleada. Y está el efecto Milei, el efecto Meloni, y el efecto de otros líderes que están demostrando al mundo que el progreso económico y la mejora de las condiciones para los seres humanos se consiguen a través del capitalismo y de la libertad individual. Podemos decir que el efecto Milei es el gran catalizador que ha sumado todos esos otros efectos que incluyen la labor de divulgación en redes sociales, de muchos de los que participamos en este foro y también lo que están mostrando muchos medios de comunicación que reflejan que las ideas de la libertad son las que generan mejoras para la gente.
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Javier Milei habla ante el World Economic Forum de Davos
"Javier Milei es un revulsivo espectacular"
- Hablas del efecto Milei, quien va a cerrar justamente el Foto del domingo en Madrid. ¿Cómo crees que puede impactar o acelerar este fenómeno que estás describiendo?
- Claramente la participación de Milei es un revulsivo, un broche de oro absolutamente maravilloso. Y un privilegio. Yo creo que el ejemplo de Argentina y como las políticas adecuadas cambian a los países a mejor rápidamente es algo que está ilusionando y diría que poniendo en marcha al mundo. Recordemos que Argentina era un país que se consideraba que estaba perdido, que estaba ya que no había ni ninguna solución, que los problemas de Argentina eran imposibles de solventar. Y se ha demostrado que, con las políticas adecuadas, esos problemas no solamente se pueden solventar, sino que se pueden encausar muy rápidamente. Y creo que ese efecto, además del hecho de que el presidente Milei defiende las ideas de la libertad y defiende sus principios y valores sin ningún tipo de complejos, es un altavoz y un revulsivo espectacular.
- Milei ha hecho en Argentina un primer ajuste muy grande sobre el déficit fiscal, después levantó el cepo al dólar y no hubo impacto inflacionario. Ahora tiene una dificultad que es la de poder sumar reservas en dólares. ¿Crees que va a poder superar esa dificultad?
- Sí, yo creo que la va a superar. Tenemos que mirar la tendencia, que es claramente de mejora. No es una tendencia lineal. Tiene momentos en los que parece que hay más retos, pero creo que es incuestionable que a medida que la economía de Argentina se abre a la entrada de dólares, va a continuar de manera muy potente. Las dificultades del Banco Central y los vencimientos que tiene con las Leliq y los pases, todos esos retos se están solventando poco a poco. No es fácil, obviamente. La herencia ha sido devastadora, pero creo que hay muchas señales que nos muestran que, de aquí a fin de año, se podría cerrar el año con los problemas del Banco Central solventados en cuanto a reservas brutas y netas.
- ¿Cuál crees que es el próximo paso que tendría que dar Javier Milei para poder consolidar el proyecto económico que intenta en Argentina?
- Creo que él lo tiene muy claro y son varios pasos los que se han ido tomando. El primero e indiscutible el el control del los desequilibrios fiscales. El segundo es el de la apertura y la desregulación, como grandes factores de dejar respirar a la economía, y el tercero es el monetario. Que es terminar con el riesgo del Banco Central como un factor de destrucción del poder adquisitivo de los ciudadanos. Esos tres factores son paralelos y complementarios. Y no son cosas que se puedan hacer fácilmente. Es curioso ver un montón de liberales, no muchos, pero varios que parecen absolutamente impacientes y que creen que se tiene que solventar todo en el minuto uno. O sea, lo que lo que se ha destruido durante más de una década no se puede reconstruir en un año y medio. Pero, en un año y medio se ha conseguido que de todos esos tres grandes bloques se ha conseguido el 60%, y ahora falta el elemento monetario que por supuesto es mucho más complejo. Y hay que añadirle bajadas de impuestos, continuar con la desregulación y continuar con el control de las cuentas públicas. Pero yo lo que veo es que el avance es mucho más positivo y mucho más rápido de lo que se pensaba.
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Pedro Sánchez y Begoña Gómez
"En España hay una coalición Frankestein"
- ¿Por qué crees que el modelo de Milei en Argentina y el modelo Giorgia Meloni en Italia no se puede aplicar hoy en España?
- Primero no se puede aplicar porque hay una coalición de gobierno que es muy similar al peronismo que ha sufrido la Argentina durante tantos años. Hay una coalición que es una especie de ensalada de distintas ideologías y de distintos objetivos que confluyen todos en uno. Que es el de aumentar masivamente el gasto público, aumentar masivamente los impuestos y utilizar al sector privado como un cajero automático del sector público. Pero se puede llevar a cabo una revolución como la que ha llevado de manera más calmada Italia, porque Italia no estaba en una situación tan dramática como la de la Argentina del kirchnerismo. Sí se está ya demostrando que la reducción del gasto y la reducción de los impuestos son elementos esenciales para fortalecer el crecimiento. Creo que eso va calando. Y en España también va calando. Lo que pasa es que es verdad que hay una arquitectura parlamentaria muy diferente a la de Argentina, donde hay unas elecciones presidenciales a las que se puede presentar alguien sin tener mayoría parlamentaria, incluso sin tener representación parlamentaria. En el caso de España no es así. El presidente está configurado por un acuerdo parlamentario en el que hay una coalición Frankenstein, como se le llama en España, en la que se unen partidos con objetivos ya ni siquiera diferentes, sino contrapuestos, como puede ser el PNV (Partido Nacionalista Vasco) y Bildu (vascos pro ETA), en el País Vasco, que obviamente tienen solo un un elemento en común, que es la toma del poder y que el gobierno esté constantemente regando de dinero con aumento de deuda.
- ¿Y eso puede cambiar en algún momento?
- Sí, puede cambiar rápidamente, y creo que va a cambiar rápidamente porque el gobierno de Pedro Sánchez se encuentra con que, aunque no para de repetir la propaganda de que España crece, crea empleo y va todo maravillosamente bien, los ciudadanos se dan cuenta de que eso no es así. Y que eso son datos agregados en los que hay un enorme nivel de maquillaje y trucos estadísticos. Ya no trucos, sino la utilización de grandes figuras agregadas que no reflejan la realidad. Y también es importante que haya un cambio. Por eso es tan importante el avance de Meloni, y el de las elecciones de Polonia, que pongan encima de la mesa que hay alternativas a una Unión Europea que se había conformado con unas políticas más que socialdemócratas, mucho más, o sea, prácticamente socialistas.
"La Unión Europea tiene dos opciones: "Negociar o perder"
- ¿Crees que la amenaza de Donald Trump, de subirle los aranceles a Europa, le va a permitir a Europa adaptarse a estos cambios?
- Sí, la Unión Europea tiene dos opciones. Negociar o perder. Y la Unión Europea tiene el acuerdo comercial más fácil de todas las diferentes naciones que están negociando acuerdos comerciales con Estados Unidos, porque el acuerdo de la Unión Europea solamente requiere que la Unión Europea implemente lo que ya recomendó Mario Draghi, el expresidente del Banco Central Europeo en el Plan Draghi. Es curioso que lo que pide la administración Trump y lo que planteó Mario Draghi fueran lo mismo. Y que parece que haya como una animadversión a llevar a cabo esos cambios simplemente por no darle la razón al presidente Trump. Pero creo que eso es nada más un proceso de reflejar posiciones aparentemente contrapuestas, pero que realidad no lo son.
- ¿Crees que a pesar de tener líneas políticas económicas tan diferentes, Pedro Sánchez y Javier Milei, la relación económica entre Argentina y España puede salir adelante?
- Sí. La relación que hay entre Argentina y España va mucho más allá de quién está en la Casa Rosada o quién está en la Moncloa. La cooperación y las décadas de inversión conjunta entre España y Argentina están muy por encima de las diferencias que se puedan dar por cuestiones ideológicas, que encima tiene muy poco que ver con lo que realmente hermana a nuestros países. Creo que la administración Milei lo que está demostrando es que lo que era habitual, que España fuese el segundo país con mayor inversión en Argentina del mundo, tiene que volver a ser. Ahora que las políticas económicas vuelven a ser políticas de cordura en las que no hay una preocupación por parte del inversor español y de las empresas españolas de que se les vaya a expropiar, o de que se les vayan a confiscar sus ingresos o sus dólares. Eso es un factor que debería llevar a que España sea el que lidere como país, y las empresas españolas deben liderar también, el proceso de recuperación de la inversión en Argentina. Precisamente por conocer mejor el país.
- ¿Cuál crees que va a ser la idea fuerza más fuerte que pueda salir de las dos jornadas en el Madrid Economic Forum?
- Creo que la primera es que el Estado no es la solución. La solución es el sector privado. Y creo que la segunda es que no hay que agachar la cabeza y resignarse ante el avance del Estado depredador, como lo llamo yo, sino que tenemos que luchar y se ha demostrado que esa lucha, además de tener la razón, tiene todos los visos de terminar en victoria.
- ¿Crees que estas ideas que llevan adelante Milei y Meloni pueden avanzar hacia la mayoría de los países de Europa?
- No, creo que primero tenemos que entender que es una anomalía lo que estamos viviendo ahora. Que en los países occidentales son los gobiernos los que han avanzado con el estatismo, con el intervencionismo, que están resignados ante unas políticas que llevan al estancamiento, a la deuda y al descontento. Entonces, si lo vemos desde un espectro más de la historia, nos damos cuenta que la tendencia que está llegando ahora es la de recuperar los valores, principios y las políticas que han hecho ricos a los países desarrollados y a los países occidentales. Igual que en Argentina. A mí me hace mucha gracia cuando la gente habla del “experimento Milei” o del “experimento Meloni” y estos nos son experimentos. Lo que ha sido un experimento ha sido el kirchnerismo. Lo que ha sido un experimento ha sido este intervencionismo abyecto en el que nos hemos metido. Pero recuperar la Unión Europea al modelo de cooperación, de libre mercado, de la libertad de capitales y la libertad de empresa con el que se creó, eso es no solamente sencillo, sino que es que es volver a su verdadera naturaleza.
- ¿Cómo crees que va a quedarla relación entre el dólar y el euro a partir de lo que está sucediendo entre Donald Trump y Europa?
- Creo que el dólar ahora se está debilitando ligeramente con respecto al euro, pero no nos podemos olvidar que la tendencia del euro con respecto al dólar histórica es terrible. El euro estaba 1.6 contra el dólar hace relativamente pocos años. Y de 1.6 fue a 1.4, de 1.4 a 1.2, de 1.2 a 1.1. Es increíble, ¿no? Que leamos que el euro se fortalece. Hombre, este es un rebote después de un desastre tremendo. Yo creo que se va a mover en general entre tocar la paridad e ir un poquito más allá del 1.15, porque el Banco Central Europeo tampoco defiende al euro y a su poder adquisitivo. Ni quiere tampoco que el euro se vaya a 1.40 o 1.60.