Las aerolíneas activaron promociones que pone a disposición de los consumidores vuelos a destinos europeos desde tan solo 21 euros.
Billetes de avión.
Las compañías aéreas Iberia y Air Europa lanzaron en las últimas horas nuevas ofertas de vuelos con precios que rompen con los estándares del mercado, en un contexto marcado por la competencia y la necesidad de recuperar la demanda post-pandemia.
Las aerolíneas activaron promociones que pone a disposición de los consumidores vuelos a destinos europeos desde tan solo 21 euros.
Desde el 28 de agosto y hasta el 22 de septiembre, Iberia ofrece vuelos nacionales desde 21 euros por trayecto y destinos europeos a partir de 25 euros.
A precios igualmente reducidos, los viajeros podrán acceder a vuelos a Roma desde 45 euros o a Londres desde 59 euros. Para aquellos que busquen cruzar el Atlántico, las opciones hacia Nueva York están disponibles desde 187 euros.
Con estos precios, Iberia no solo está buscando un golpe de efecto en las rutas nacionales, sino también ganar terreno en la competencia con Air Europa, que sigue la misma tendencia de precios bajos. La oferta también se extiende a vuelos a América Latina y Asia, con tarifas competitivas para quienes buscan destinos más lejanos.
Por su parte, Air Europa no se queda atrás. Con la campaña "Time to Fly", activa hasta el 14 de septiembre, la aerolínea también ha puesto en juego tarifas que rompen con los patrones tradicionales del mercado. Desde 21 euros en trayectos nacionales y 25 euros a destinos europeos, hasta 269 euros para vuelos hacia América Latina.
Air Europa también ofrece tarifas para vuelos largos desde 187 euros hacia Estados Unidos, un precio comparable al de Iberia, pero con la ventaja de ofrecer flexibilidad de fechas hasta 2026, lo que permite a los viajeros planificar con más margen de tiempo.
La guerra de precios no solo beneficia al consumidor, sino que pone en evidencia las tensiones dentro de la industria. Si bien los vuelos más baratos pueden atraer a una mayor cantidad de pasajeros, los márgenes de rentabilidad de las aerolíneas se ven reducidos. Las aerolíneas deberán encontrar un equilibrio entre precios accesibles y la viabilidad económica de sus operaciones a largo plazo.