El presidente del BBVA atribuyó parte del fracaso a “cierta confusión” entre los inversores “sobre la expectativa de una segunda opa a mejor precio”.
Carlos Torres, presidente del BBVA.
El presidente del BBVA, Carlos Torres, calificó este viernes como “una oportunidad perdida para Cataluña, España y Europa” el fracaso de la opa lanzada sobre Banco Sabadell, que solo consiguió el respaldo del 25,47 % del capital.
En declaraciones radiales, Torres atribuyó parte del fracaso a “cierta confusión” entre los inversores “sobre la expectativa de una segunda opa a mejor precio”. “Capítulo cerrado”, afirmó, tras conocerse que la operación no prosperó al no alcanzar el 50 % del capital necesario.
El ejecutivo sostuvo que el rechazo del consejo de administración del Sabadell pesó “de forma determinante” en la decisión de los accionistas, seguido por las “perspectivas ante una segunda opa” con un valor más alto. Explicó que las previsiones iniciales del BBVA se basaban en cálculos sobre la intención de los inversores institucionales, pero finalmente “ni los minoristas ni los fondos pasivos optaron por el canje”.
“Pero no miramos atrás. Cerramos el capítulo y miramos al futuro”, subrayó Torres, quien aseguró que el BBVA tiene “un futuro brillante”.
El banquero destacó además que la subida de las acciones del BBVA en la apertura de los mercados se debía a “la disipación de la incertidumbre sobre la segunda opa”. Preguntado sobre si planea volver a intentar la operación, lo descartó de plano: “Es un capítulo cerrado”.
Torres también reveló que llamó al presidente del Sabadell, Josep Oliu, “para desearle lo mejor a él y a su banco”.
Carlos Torres dejó claro que no contempla dimitir tras el fracaso de la opa. “Mi continuidad al frente del grupo no dependía del resultado de este proceso”,
afirmó.
Según explicó, fue “el consejo de administración en pleno” el que tomó las decisiones, incluida la de presentar la oferta. “Nuestra labor es intentar aquellas cosas que tienen sentido”, defendió.
El presidente del BBVA insistió en que la operación “hubiera sido fantástica” y aseguró sentirse “plenamente respaldado” por el consejo y por la junta de accionistas.
“Obviamente el resultado no era el que esperábamos, pero respetamos la decisión de los accionistas del Sabadell”, añadió. “En todo momento hicimos lo que creíamos que teníamos que hacer. Era una oferta buena para todos: clientes, accionistas, empleados, España y Europa. Que no haya prosperado es una oportunidad perdida para todos”, concluyó.