En la primera cumbre bilateral desde el Brexit, Reino Unido y la Unión Europea alcanzaron un acuerdo general para redefinir su relación, tras años de tensiones.
El compromiso, cerrado horas antes del encuentro celebrado en Londres, fue anunciado por el primer ministro británico, Keir Starmer, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, António Costa.
Aunque el pacto no revierte ninguna de las bases del Brexit —Reino Unido no volverá al mercado único ni a la unión aduanera, ni restaurará la libre circulación de personas— }, marca un giro hacia una mayor cooperación en áreas estratégicas clave.
Reino Unido podrá participar en compras conjuntas de armamento con el fondo europeo de defensa, dotado con 150.000 millones de euros.
Se refuerza la cooperación militar, especialmente en el marco del apoyo a Ucrania.
Aún quedan pendientes negociaciones para permitir que fabricantes británicos accedan al fondo en igualdad de condiciones.
Prórroga para la pesca
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Se prolonga hasta 2038 el acceso de la flota pesquera europea a aguas británicas, una concesión clave del gobierno de Starmer.
Esta decisión beneficia directamente a la “Flota de Gran Sol”, integrada por 87 buques españoles, principalmente de Galicia y el País Vasco, que en 2024 capturaron más de 31.000 toneladas de pescado por valor de 151 millones de euros.
Movilidad juvenil
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Se acuerda establecer un mecanismo para que jóvenes de ambos bloques puedan estudiar, trabajar o hacer voluntariado, aunque con limitaciones temporales. Los detalles del programa aún están por definirse.
Futuro acuerdo fitosanitario
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Ambas partes pretenden cerrar un pacto permanente que facilite el comercio agroalimentario, bajo la condición de que Reino Unido se alinee con la normativa comunitaria y acepte la jurisdicción del Tribunal de Justicia de la UE, lo que generó críticas entre los sectores más pro-Brexit.
Energía
Migración
Gibraltar: el gran ausente
A pesar de los avances en múltiples áreas, el estatus de Gibraltar sigue sin resolverse. Ni siquiera fue abordado en esta cumbre, pese a que España lo considera un elemento clave para normalizar la relación. Bruselas asegura que las negociaciones continúan, pero no hay plazos concretos para alcanzar un acuerdo final.
Starmer: "No se trata de mirar atrás, sino de avanzar"
"Hoy no se trata de mirar atrás, sino de avanzar", afirmó Starmer tras la reunión, que la jefa de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen calificó como "un nuevo capítulo en la relación UE-Reino Unido"-
Por su parte, António Costa subrayó que “la prosperidad, la seguridad y la paz en Europa requieren unidad y cooperación”.
Este acuerdo representa un paso importante hacia la reconstrucción de vínculos prácticos entre Bruselas y Londres, sin alterar las bases ideológicas del Brexit, pero sentando las bases para una relación más estable y funcional.