Madrid ya huele a castañas y a ese entusiasmo que le entra a la ciudad cuando toca encender luces como si no hubiera mañana. Y este año, el foco vuelve a ponerse en Plaza de España, que se ha propuesto ser el epicentro navideño más fotografiado de la capital.
Ya está plantado en plena plaza el que probablemente sea el árbol de Navidad más original de España. Nada de discretos adornos ni lucecitas tímidas. Hablamos de 28 metros de altura, 50 de ancho, 55 kilómetros de luces LED (sí, km, no metros) y una estrella de tres metros en lo alto que amenaza con verse desde Atocha.
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Concierto sorpresa
Y para que el encendido no se quedara en un “3, 2, 1… y ya”, este jueves viene con regalo extra: un concierto gratis de un grupo español muy conocido que reaparece tras ocho meses de silencio.
¿El nombre? Guardado bajo llave, como si fuera el final de una serie de misterio. Resultado: media ciudad planeando “pasar casualmente por allí” por si acaso.
Pero la fiesta no se queda en el árbol. Frente a él, Seguros Santalucía ha instalado un buzón gigante para dejar deseos navideños. Cuatro de ellos se harán realidad en diciembre de la mano de creadores de contenido como Susana Molina o Lara Tronti, que añadirán el toque influencer a la magia navideña, por si hacía falta.
El mercadillo, después del susto: revisado, corregido y finalmente abierto
Porque sí, mientras Madrid se preparaba para posar junto al árbol de ciencia ficción, el mercadillo navideño de Plaza de España tenía su propio drama técnico. Que si el árbol interactivo no cumplía, que si las guirnaldas del techo tampoco… En resumen: no había forma de abrir sin que los inspectores pusieran cara de “ni se les ocurra”.
Pero este jueves, por fin, la vicealcaldesa Inma Sanz anunció que todos los informes técnicos dan luz verde (nunca mejor dicho). Deficiencias subsanadas, permisos en regla, sustos pasados y ya se puede pasear entre puestos, regalos y churros sin riesgo de que nada salga volando.
Así que ya está todo en marcha: mercadillo abierto, árbol encendido, concierto sorpresa en camino, pista de hielo no muy lejos y un ambiente que promete convertirse en la postal oficial de diciembre.