El nuevo fenómeno llegó para quedarse en las cocinas de los españoles. Una manera de comer sano todos los días y dejar de lado las preocupaciones por el menú.
El término batch cooking —cocinar por tandas— se ha instalado en la cocina de los españoles como una solución práctica para ahorrar tiempo y dinero.
Rico, sano, barato y sin stress, es una tendencia que crece en los hogares donde siempre faltan las horas y sobra el apetito.
La idea es dedicar unas horas del fin de semana a preparar varios platos que luego se combinan entre semana. Una tendencia que arrasa en redes sociales y que cada vez recomiendan más nutricionistas.
Con jornadas laborales extensas y agendas apretadas, muchas familias encuentran en el batch cooking la manera de organizar la alimentación sin recurrir constantemente a comida rápida o precocinada. Preparar todo un domingo garantiza tuppers listos para llevar a la oficina o cenas resueltas en minutos.
El éxito del método tiene tres claves indispensables: que los platos se conserven bien en la nevera, que sean fáciles de recalentar y que permitan variaciones. Sopas, guisos y ensaladas de legumbres cumplen con esas condiciones y son protagonistas habituales de las cocinas batch.
1. Crema de calabaza o verduras: se conserva varios días y sirve como primer plato o cena ligera.
2. Pollo al horno con especias: rinde mucho y se puede usar en ensaladas, wraps o platos de arroz.
3. Lentejas estofadas: clásico de cuchara que aguanta sin perder sabor.
4. Arroz integral o quinoa cocida: base versátil para mezclar con verduras o proteínas durante la semana.
5. Tortilla de patatas al horno: aguanta en la nevera y se come tanto fría como caliente.
El batch cooking comenzó como tendencia en redes sociales se consolida como costumbre creciente cada vez en más hogares españoles planifican sus menús con antelación para comer mejor y reducir el desperdicio de alimentos. El batch cooking ha pasado de ser un hashtag a convertirse en una rutina real en la cocina.