1 de febrero 2025 - 16:37hs

Nicolás Maduro mueve las piezas para reforzar su permanencia en el poder. En medio de una intensa represión que ha llenado las cárceles de presos políticos y bajo la sombra de acusaciones de fraude en su controvertida reelección de julio de 2024, el Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el chavismo, convocó a elecciones de diputados y gobernadores para el próximo 27 de abril.

Elvis Amoroso, presidente del CNE, exdiputado del partido de gobierno y miembro del círculo cercano al mandatario venezolano, condicionó la participación de los partidos de oposición a la firma de un documento en el que deberán comprometerse a “respetar y acatar los resultados”.

Hasta el momento, el CNE no ha presentado prueba alguna del escrutinio que proclamó la reelección de Nicolás Maduro, mientras que las actas en poder de la oposición, avaladas por el Centro Carter, reflejan la victoria de su candidato, Edmundo González.

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Sin embargo, Elvis Amoroso afirmó que en las próximas elecciones el CNE garantizará “la mayor confiabilidad, transparencia y las auditorías correspondientes".

Recientemente, el chavismo aprobó la ley Simón Bolívar que castiga con inhabilitaciones de hasta 60 años a dirigentes políticos que apoyen sanciones al país o desconozcan a las autoridades.

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El presidente del CNE, Elvis Amoroso, proclamó la victoria de Maduro, pero nunca publicó resultados que permitan auditar el proceso electoral.

El presidente del CNE, Elvis Amoroso, proclamó la victoria de Maduro, pero nunca publicó resultados que permitan auditar el proceso electoral.

Las elecciones se llevarán a cabo en el clima represivo que siguió a las presidenciales, durante el cual han sido encarcelados dirigentes y activistas de los principales de partidos de oposición, en una arremetida que menoscabó sus estructuras.

Foro Penal precisa que al cierre del 20 de enero había un total de 1.600 presos políticos, entre los que se encuentran dirigentes juveniles, líderes regionales y miembros de la dirección nacional de partidos como Vente Venezuela, la organización de María Corina Machado, la principal líder de la oposición que fue inhabilitada para participar en las elecciones presidenciales.

La desconfianza que genera el CNE

Jesús Castellanos, politólogo y experto en temas electorales, explica que el llamado a elecciones ocurre en medio de un gran escepticismo porque el CNE no ha publicado en Gaceta Electoral, como obligan las normas, los resultados de las elecciones en las que se proclamó a Maduro como vencedor.

“Este paso es la garantía de que los resultados se corresponden con lo que sucedió en la votación y el no hacerlo es totalmente irregular. Además, tampoco se realizaron las auditorías poselectorales, incluyendo la que podría haber determinado si hubo un ataque a la transmisión de resultados, como ha argumentado el CNE”, añade el especialista.

Ante estos precedentes, Castellanos se pregunta: “¿Qué garantía puede dar el CNE de que va a celebrar las auditorías electorales? ¿Qué garantía hay de que van a ser rigurosas?”.

Eugenio Martínez, director del portal web dedicado al análisis electoral Votoscopio, resalta que “si hacemos abstracción de las omisiones y acciones del CNE tras las elecciones presidenciales hay que decir que hay fallas, por ejemplo, no se han aprobado las proyecciones poblacionales de 2025 con el estimado de cuántas personas están en el país y cómo están distribuidas”.

Agrega que “este dato es el que tendría que usar el CNE para definir las circunscripciones de votación para unas parlamentarias, y sin embargo, se llama a elecciones sin este paso previo indispensable”.

Además, dice Martínez, “el CNE no publicó el cronograma y a poco más de tres meses no se sabe nada sobre las distintas fases del proceso, y tampoco se ha hecho la actualización del registro electoral”.

En su opinión, el documento que deberán firmar los participantes comprometiéndose a respetar y acatar los resultados “no está previsto en las leyes y se ha utilizado en otras elecciones. Lo grave es que la firma de ese documento se ate a la Ley Simón Bolívar que establece que hay que reconocer todos los actos de las autoridades so pena de ser sancionado”.

El dilema de la oposición ante las nuevas elecciones en Venezuela

La oposición venezolana enfrenta la disyuntiva de acudir o no a las elecciones del próximo 27 de abril, y las interrogantes son múltiples. En el pasado, en situaciones similares, ha optado por llamar a la abstención, sin que esto resquebraje al régimen ni evite que las autoridades surgidas de las elecciones ejerzan el poder.

En el otro extremo de la balanza, tras los señalamientos de fraude en las pasadas elecciones presidenciales, no es nada sencillo reivindicar la ruta electoral como camino al cambio político.

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Edmundo González y María Corina Machado: la oposición venezolana enfrenta la disyuntiva de acudir o no a las elecciones del 27 de abril

Edmundo González y María Corina Machado: la oposición venezolana enfrenta la disyuntiva de acudir o no a las elecciones del 27 de abril

Si bien esta disyuntiva estaba prevista, Nicolás Maduro la ha adelantado. El mandato de los diputados vence en diciembre y el de los gobernadores en noviembre. Por lo tanto, a menos que haya un cambio legal que permita recortar los períodos, quienes sean elegidos en abril deberán esperar siete u ocho meses para asumir sus cargos.

¿Por qué Maduro quiere hacer estas elecciones de manera apresurada? Jesús Castellanos considera que “ante la ausencia de legitimidad de origen en el cargo de presidente de la república, busca que las elecciones que están por venir ayuden a pasar la página de las presidenciales. Además, intentará alcanzar legitimidad con las elecciones de otros espacios de poder como el parlamento y las gobernaciones”.

Inmediatamente se pregunta: ¿Puede la oposición participar sin tener ningún tipo de garantía, dado que el CNE es capaz de falsear los resultados? Participar, de alguna manera, sería facilitar los objetivos de Nicolás Maduro.

El llamado a no participar de María Corina Machado

El pasado 19 de enero María Corina Machado, quien permanece en resguardo, señaló a través de un video que Edmundo González es el presidente electo y que la oposición no debe participar en otra elección hasta tanto no se respete el voto de la mayoría.

“El resultado debe y va a ser respetado. Hasta que ese resultado no entre en vigor, no procede participar en elecciones de ningún tipo. Ir a votar una y otra vez sin que se respeten los resultados no es defender el voto, es desvirtuar el voto popular como medio de lucha democrática”, dijo Machado.

Juan Pablo Guanipa, uno de los dirigentes nacionales del partido de oposición Primero Justicia, calificó de farsa el llamado a elecciones y criticó a Elvis Amoroso, indicando que “hay que tener riñones, desvergüenza y cinismo para presentarse con la cara lavada ante el país, después de ser el instrumento de Maduro para validar el fraude del 28 de julio”.

Partidos minoritarios, que en las elecciones presidenciales no apoyaron la candidatura de Edmundo González y que en su mayoría han sido objeto de decisiones del Tribunal Supremo de Justicia que han forzado un cambio en sus autoridades, se disponen a participar.

En este entorno todo apunta a que la abstención será elevada. En las elecciones convocadas se elegirán 277 diputados y 23 gobernadores. Todo parece dispuesto para que el partido de Maduro mantenga el control del Parlamento y de una amplia mayoría de las gobernaciones.

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