Sin embargo, la ex senadora y ex fiscal general de California ha variado sus posiciones en algunos temas con los años. "Las posiciones de la vicepresidenta han sido moldeadas por tres años de gobierno eficaz como parte de la administración Biden-Harris", señaló un asesor de la campaña, según recogió CBS News.
Cómo hacer frente a las oleadas migratorias
En 2021, el presidente Biden le encargó a Kamala Harris que se ocupara de trabajar sobre las causas que provocaban que miles de migrantes de Centroamérica llegaran a la frontera. Como parte de esos esfuerzos, en 2023 anunció que había ayudado a que el sector privado comprometiera unos 3.000 millones de dólares en inversiones en comunidades de la región para ofrecer nuevas oportunidades y que, por lo tanto, hubiera menos incentivos para migrar hacia los Estados Unidos.
En ese marco, Harris hizo una visita a Guatemala en junio de 2021 que le valió fuertes críticas, después de que dijera que su consejo para aquellos que querían hacer la "peligrosa travesía" de cruzar la frontera entre México y Estados Unidos era simple. ¿Cuál? "No vengan".
Kamala Harris en El Paso en 2021 (2) - AP.webp
Kamala Harris durante una visita a un puesto fronterizo en El Paso en 2021
AP
La situación en la zona limítrofe cambió desde que recibió el encargo, por el cual los republicanos la tildaron de "zarina de la frontera", y no sólo se diversificó el origen de los migrantes, ya que llegaron muchos de países como Venezuela o Ecuador, sino que a fines del año pasado los cruces alcanzaron una cifra récord.
A raíz de esto, la administración de Biden implementó una serie de políticas, entre ellas la de restringir las solicitudes de asilo, y cayó el número de intentos de ingresar ilegalmente al país.
Este año, apoyó un proyecto de ley bipartidista sobre seguridad en la frontera que contemplaba ampliar los centros de detención de migrantes y acelerar el proceso de evaluación de solicitudes de asilo, así como las deportaciones. A la vez, establecía una nueva autoridad de emergencia que podría cerrar la frontera si la cantidad de migrantes que llegaba a la zona limítrofe superaba las 4.000 personas por día durante una semana. La propuesta logró avanzar en el Senado, pero fracasó en la Cámara de Representantes después de que Donald Trump le pidiera a los republicanos que votaran en contra.
En su discurso en la Convención Demócrata, Harris buscó el punto medio entre dureza y apertura hacia los sin papeles, acusó al ex presidente de boicotear la ley y prometió reavivarla si es elegida en noviembre. “Sé que podemos estar a la altura de nuestra orgullosa herencia como nación de inmigrantes y reformar nuestro maltrecho sistema de inmigración. Podemos crear una vía ganada a la ciudadanía y asegurar nuestra frontera”, manifestó.
De todas formas, como senadora y durante la campaña de 2020, en la que fue precandidata a la presidencia, había adoptado un tono más progresista en el tema migratorio y prometió, por ejemplo, cerrar centros de detención de migrantes. Además, sugirió que ingresar al país sin permiso no debería representar un delito.
¿Mano dura con los delincuentes?
En el inicio de su carrera, Harris se dedicó a procesar a abusadores de menores y responsables de tráfico sexual. Como fiscal de San Francisco primero y luego como fiscal general de California, aumentó las tasas de condena de delincuentes, especialmente los más violentos, lo que le valió críticas de la izquierda.
"Ella fue fiscal general en California en un momento donde todavía había una visión bastante conservadora de cómo actuar en el caso del crimen. Y aunque ella durante esos años también evolucionó, al principio fue dura. Luego fue evolucionando hacia posiciones más progresistas", señaló la periodista María Ramírez, autora de la biografía "Kamala Harris, la primera", a El Observador USA.
Kamala Harris como fiscal de California en 2012 - AP.webp
Kamala Harris en una audiencia en California en 2012, cuando era fiscal general
AP
A la vez, la derecha la ha acusado de ser suave en su lucha contra el crimen, aunque tuvo un historial contradictorio. Por ejemplo, como fiscal de San Francisco se negó a pedir la pena de muerte contra una persona acusada de matar a un policía, mientras que como fiscal general del estado peleó por mantener la pena capital.
Durante las primarias de 2019, Kamala Harris buscó distanciarse de su imagen de "mano dura" con la delincuencia y presentó una postura más progresista que Biden en muchos temas, como el confinamiento solitario, las sentencias federales mínimas obligatorias y la despenalización de los cruces fronterizos.
Y en la campaña hacia las elecciones de noviembre está aprovechando su experiencia como fiscal para oponerse a Trump, que enfrenta varias causas y fue condenado por pagos ilegales a la actriz porno Stormy Daniels. "Me enfrenté a perpetradores de todo tipo, depredadores que abusaban de las mujeres, defraudadores que estafaban a los consumidores, tramposos que rompían las reglas para su propio juego", dijo Harris en un evento de campaña en Wisconsin. "Así que escúchenme cuando digo que conozco al tipo de Donald Trump".
¿Medicare para todos?
Cuando era senadora, Kamala Harris apoyó el plan de Bernie Sanders de expandir Medicare, un programa del gobierno que ofrece cobertura en salud para los mayores de 65 y a los más jóvenes en caso de discapacidad, a todos los estadounidenses y excluir a las compañías privadas. En su campaña para las elecciones de 2020 insistió en una propuesta similar.
"Ahora mismo, el sistema sanitario estadounidense es un entramado de planes, proveedores y costos que ha dejado a los ciudadanos frustrados, impotentes y a las compañías de seguros al mando. Y la conclusión es que la sanidad cuesta demasiado. Por eso, como candidata a la presidencia, me propongo realizar un cambio transformador para mejor", dijo en su plataforma de 2019, en la que esbozó una propuesta para implementar un seguro médico estatal, que no contemplaba eliminar a los seguros privados.
Sin embargo, para las elecciones de noviembre ya no contempla un plan de este tipo, según reveló su equipo de campaña.
Para reducir mejorar las condiciones del acceso a la atención sanitaria, planea mantener negociaciones con las farmacéuticas para bajar los precios de los medicamentos, como el acuerdo que anunció recientemente con Biden. Además, quiere sostener la ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA, sigla en inglés), conocida como Obamacare, que permite que más personas tengan acceso a un seguro de salud.
Pozo de fracking en Pensilvania - AP.webp
Prohibir el fracking, ¿sí o no?
Durante la campaña de 2019, la actual vicepresidenta dijo: "Sin duda estoy a favor de prohibir el fracking". "Debemos reconocer que el impacto residual del fracking es enorme en términos del impacto a la salud y la seguridad de las comunidades", dijo en ese entonces, en referencia a esta técnica de extracción de gas o petróleo del subsuelo mediante la presión hidráulica, que es cuestionada por los ecologistas por la contaminación que provoca en el agua.
En un evento de campaña en Pensilvania este mes, Trump de hecho dijo que Harris estaba "en contra del fracking, en contra de las perforaciones petrolíferas", y que lo iba a prohibir.
Pero el equipo de campaña de Harris no ha sido claro en relación a su postura actual y apuntó que la administración Biden apoya las energías limpias y el crecimiento de puestos de trabajo en ese sector. Y aunque el gobierno actual ha trabajado para que se encarezca la extracción hidráulica en tierras públicas, no lo prohibió totalmente.
