De ser campeón en 2019 a quedarse sin equipo y radicarse en el interior

Con los albos se ganó la titularidad cuando Guti se hizo cargo del equipo en el Torneo Apertura, en marzo del año pasado.

El defensor disputó 34 partidos, recibió dos tarjetas rojas y por una contractura en el posterior quedó afuera de las finales contra Peñarol, pero a pesar de eso fue una de las figuras del equipo que se coronó campeón del Uruguayo.

Tras levantar la copa junto a sus compañeros, el corpulento zaguero que se ganó el cariño del Gran Parque Central con sus intervenciones y despejes, terminó su préstamo con los tricolores y regresó a su Rivera natal para pasar las fiestas y recibir el Año Nuevo.

Hoy, casi tres meses después, el zaguero sigue en la ciudad fronteriza y lejos del fútbol, sin equipo.

¿Qué pasó con “Mr. Boof”?

Para que Carvalho siguiera en Nacional una vez finalizada su cesión, los tricolores debían hacer uso de la opción de compra que incluía el préstamo por el que llegó al club, por el 80% de la ficha, algo que no fue considerado en el club por su política de ajuste económico y porque el rendimiento de Laborda en las finales dejó una buena imagen para el futuro, lo que se cristalizó en los primeros partidos de este año, en los que el juvenil respondió en buena forma.

Tras pasar las fiestas en Rivera, según supo Referí, el defensor debía volver a Oslo, Noruega, a mediados de enero para retomar los entrenamientos con su equipo, Valeranga, el club dueño de su pase.

Pero “Mr. Boof”, como se apoda, no viajó a Europa y permaneció en su ciudad.

Antes, el futbolista había recibido tres ofertas para ir a jugar al exterior: desde Arabia Saudita, Argentina y España tuvo propuestas concretas, formales y escritas, de clubes que se interesaron por él, que también llegaron a Valeranga, pero el jugador no las contestó.

Esas situaciones generaron un quiebre con el grupo empresarial que los representaba, con el que había estado vinculado por cinco años, desde que saltó de Tacuarembó FC a Malmoe de Suecia, donde llegó a disputar la Liga de Campeones en sus primeros meses en Europa, hasta que arregló con Nacional y, ya estando en Montevideo, también lo asesoró para firmar con una importante marca internacional de indumentaria deportiva.

¿Por qué descartó esas propuestas? Según supo Referí, en los últimos meses, tras sus buenos rendimientos en Nacional, al jugador se le acercaron empresarios brasileños que le prometieron llevarlo a algunos de los grandes equipos del Brasileirao, lo que ilusionó al zaguero, quien admira al fútbol del país vecino y que en sus redes sociales comparte mensajes tanto en portugués como en español.

Pero el período de pases se cerró en Brasil y Carvalho no tuvo noticias. Tampoco regresó a Noruega para retomar sus entrenamientos con Valeranga, club dueño de su ficha.

El zaguero, con quien Referí intentó comunicarse sin tener respuestas, pasa sus días en Rivera, como se puede ver en sus redes sociales, disfrutando de su familia y de la pesca, alejado del fútbol y a la espera de saber cómo continuará su carrera, mientras puede decir que es un vigente campeón del fútbol uruguayo en pausa futbolística.