A más de dos meses de que Noah Bublé (3 años) tuviera su primera sesión de quimioterapia en un hospital especializado de Los Ángeles, debido a un cáncer de hígado diagnosticado en los primeros días de noviembre, los estudios clínicos detectaron una mejoría. Según fuentes allegadas a la familia no era la mejoría que esperaban, tanto los médicos como sus padres, pero Luisana Lopilato y Michael Bublé, están conformes con el resultado.
El lunes 26 comenzó la segunda etapa del tratamiento, que es más intensa, más fuerte, el pasaje a esta segunda fase es posible ya que los resultados de la primera fueron buenos.
Luisana, Michael y Noah pasaron la Navidad y Fin de Año en la casa de Los Ángeles que alquilaron cuando decidieron que el tratamiento se llevaría a cabo en esa ciudad de Estados Unidos. También se encuentra con ellos Elías Bublé, el otro hijo del matrimonio, de once meses. También viajaron para las fiestas a acompañar a Luisana sus hermanos Darío y Daniela Lopilato, y sus padres, Beatriz y Eduardo, que se han mantenido muy cercanos a la actriz, pero muy herméticos en cuánto a declaraciones.
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