Diego Batistte

De Idea Vilariño a Luisa Cuesta: ¿Qué mujeres eligen los montevideanos para sus calles?

La iniciativa Mujeres con Calle abrió una votación digital en donde cualquiera puede proponer sus ideas; entre ellas aparecen Juana de Arco, China Zorrilla y hasta la Coca Sarli

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07 de marzo de 2020 a las 05:00

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El número se publicó hace algunos meses. Impactó en ese momento y el efecto se mantiene ahora que queda por escrito una vez más: de las 5.678 calles que tiene la ciudad de Montevideo, menos de 150 llevan el nombre de alguna mujer. Sí, está claro: en el terreno de las desigualdades que las mujeres padecen día a día, esta es una de las menos insidiosas. Una que no complica demasiado. Una que no va a ocupar los principales reclamos de este 8 de marzo. Pero es, a fin de cuentas, una desigualdad. Una falta de reconocimiento y un agujero negro en la estima que este país le tiene a ciertos nombres que ayudaron a construirlo. Quizás nombrar una calle no es el homenaje más grande que se puede hacer, y de seguro no soluciona los problemas actuales, pero es algo. Y algo es algo. 

Con ese espíritu apareció Mujeres con calle, una iniciativa que partió del departamento de Desarrollo Urbano de la Intendencia de Montevideo y que desde 2018 ha recolectado nombres tentativos de mujeres en distintos centros comunales y barrios de la ciudad, siempre propuestos por los vecinos de la zona. Según publicó el semanario Búsqueda en diciembre, en este trabajo se alcanzaron 120 propuestas, de las que se seleccionaron 68 y que se enviaron a la entidad que las elige, la Comisión Especial de Nomenclatura. Esa oficina terminó decantándose por ocho nombres, se rechazaron 32 y 28 se mandaron a estudio. En las seleccionadas estaban incluidas la activista estadounidense Rosa Parks y la docente y artista uruguaya Amalia Polleri, entre otras mujeres ilustres. 

En octubre, el proyecto tuvo un nuevo impulso: la Junta Departamental aprobó un proyecto de decreto emitido por el intendente Christian Di Candia que estipula que tres de cada cuatro calles de la capital deberán tener nombres de mujeres, algo que aún no se ha reglamentado. Y desde hace algunos días se lanzó una nueva plataforma de participación en la iniciativa, que involucra y pone a pensar a quien tenga ganas de hacerlo: a través de la web de la intendencia, en el apartado de Montevideo Decide, se habilitó un formulario en que cualquier usuario puede proponer un nombre, resumir su propuesta en una breve biografía y/o votar la que más le interese. Las postulaciones que pasen los 100 votos se evalúan bajo los criterios que la Comisión de Nomenclatura acordó, que entre otras cosas establece que la persona nominada tiene que haber muerto hace diez o más años –aunque puede haber excepciones– y que tiene que tener relación en algún punto con Uruguay y su historia, aunque también se habilitarán nombres extranjeros que lo ameriten. 

“Queremos intentar que se propongan y se aprueben más nombres de mujeres rescatadas de la historia a calles nuevas; somos respetuosos y queremos ir primero por las que no tienen nombre”, explicó Silvana Pissano, directora de Desarrollo Urbano de la IMM. “De todas formas, yo personalmente suscribo a que los cambios forman parte de la historia de las ciudades. Si no fuera así, en la Ciudad Vieja las calles todavía tendrían nombres de santos como San Pedro y San Juan. El horizonte es tener una ciudad donde se refleje en el nomenclátor montevideano el aporte de las mujeres a nuestra historia”, agregó. 

Diego Batistte
Algunos carteles de la avenida Delmira Agustini, en el Prado, no están en condiciones

Uruguayas e ilustres

Las propuestas en la plataforma de Montevideo Decide eran, hasta el miércoles de esta semana, más de 150. Las más votadas son caras conocidas, uruguayas, históricas, y de vez en cuando se repiten. Hasta ahora, la mayor cantidad votos se lo lleva Delmira Agustini (433) y es curioso, porque ella ya tiene una calle con su nombre: es una de las avenidas que atraviesan el Parque del Prado. El podio lo completan la actriz China Zorrilla (396) y la histórica figura del carnaval Marta Gularte (375). Entre las diez más votadas solo hay dos extranjeras: Juana de Arco, en cuarto lugar con 364 votos (que en realidad ya tiene calle), y la cantautora argentina María Elena Walsh, que está octava con 247 votos. Entre esas diez aparecen más figuras de la cultura uruguaya, como Rosa Luna (309), Idea Vilariño (266) y Paulina Luisi (246), que también ya tiene una calle con su nombre, pero a la vez surgen dos nombres que salen de la historia reciente del país: la militante por los Derechos Humanos Luisa Cuesta, que tiene 306 votos, y la detenida desaparecida Elena Quinteros, que cierra la lista con 243 votos. 

Quinteros y Cuesta no son los únicos nombres relacionados con la última dictadura. Entre las postuladas también aparecen Nibia Sabalsagaray –torturada y asesinada en 1974– con 167 votos, Susana Pintos –mártir estudiantil– con 218 y Nelsa Gadea Galán –desaparecida– con 109. La política uruguaya también aporta nombres: aparecen la activista por los Derechos Humanos Elisa Delle Piane (101), la abogada, política y escritora Alba Roballo (157) y hasta la ex primera dama María Auxiliadora Delgado, que en teoría está fuera de competencia al haber muerto hace menos de diez años. 

Obviamente, de donde salen más nombres es de la cultura. Después de las obvias y necesarias Idea –es increíble que aún no tenga una calle con su nombre–, China y Rosa Luna, la segunda tanda está plagada de mujeres que hicieron historia; la infaltable Petrona Viera lidera este segundo grupo aunque ya existe una calle con su nombre, y la siguen las poetas Marosa di Giorgio, Armonía Somers y Amanda Berenguer, las cantantes Amalia de la Vega y Lágrima Ríos, la legendaria actriz de la Comedia Nacional Margarita Xirgu, la fotógrafa Dina Pintos Favaro y la directora de cine italouruguaya Rina Massardi, responsable de la primera película lírica sudamericana. En este segmento hay varias mujeres más, pero el grupo de la cultura lo cierra, sin embargo, una mujer que está vivita, coleando y cantando: Marihel Barboza, una de las voces de la música tropical uruguaya. Al ritmo del Colé Colé, Marihel cosechó casi 30 votos. 

La selección uruguaya aporta también a aquellas que dejaron su huella en la historia nacional, en la ciencia, la tecnología, el periodismo y otros menesteres. Allí aparecen, por ejemplo, dos mujeres que se relacionaron sentimentalmente con José Artigas: Melchora Cuenca e Isabel Martínez. También Rita Ribeira –la primera mujer en votar–, Amanda Rorra –activista afrouruguaya– y la informática y pionera uruguaya Ida Holz, que no entra en las posibilidades porque está viva.

Diego Batistte
La avenida Alfosina Storni, en el Prado

De todas partes vienen

Uno pensaría que en esta plataforma los nombres uruguayos tendrían que ser mayoría, pero son las mujeres internacionales las que marcan el pulso de las propuestas. Y hay tantas que, de nuevo, tenemos que ponernos a segmentar. Las obvias, claro, están; no faltan ni Evita, ni Juana de Arco, ni Rosa Parks, ni Teresa de Calcuta, ni Marie Curie.

Pero pasa lo mismo con las internacionales que con las uruguayas; la cultura y el espectáculo es el ámbito que más nombres cosechó. Por ejemplo, alguien pensó que era una buena idea nombrar una calle de Montevideo con el nombre de Isabel “la Coca” Sarli. O de Audrey Hepburn. O de Marilyn Monroe. O de María Gabriela Epumer, música argentina conocida popularmente por ser la guitarrista de Charly García.

Entre las seleccionadas, las escritoras y filósofas son las más populares. Los votos de la gente, dispersos y variables, se nuclean en torno a los nombres de Alejandra Pizarnik, Virginia Woolf, Ayn Rand, Mary Shelley, Jane Austen, Agatha Christie, Sor Juana Inés de la Cruz, Rosa Luxemburgo, Hanna Arendt y Ursula K. Le Guin. También hay espacio para cantantes del estilo de Violeta Parra y Mercedes Sosa, símbolos como Anna Frank y Simone de Beauvoir, y emblemas del fotoperiodismo, como Gerda Taro.

Pero las nominaciones no se limitan a las artes; también hay lugar para guerreras, aventureras, mujeres que quedaron enmarcadas en la historia y que hoy son mucho más que un rastro en las páginas del mundo. Así es como Liudmila Pavlichenko, francotiradora del Ejército Rojo con 309 muertes confirmadas, llega desde la URSS. Como Hipatia de Alejandría, una filósofa y astrónoma egipcia, se planta con más de 200 votos. Y como ellas, también pisan fuerte Valentina Tereshkova –cosmonauta rusa y la primera mujer en viajar al espacio– la princesa Diana de Gales, Emma Goldman –anarquista rusa–, Harriet Tubman –luchadora anti esclavitud– y la pilota Amelia Earhart, una aventurera nata que quedó inmortalizada en la historia de la aviación.  

Luego llegan las inventoras y las científicas, con Florence Nightingale, Ada Lovelace y la ya mencionada Marie Curie despegadas del resto. Alguien se encargó, sin embargo, de subrayar y recordar a distintas mujeres que, a través de sus creaciones, solucionaron la vida de millones con objetos que hoy damos por sentado pero sin los cuales todo sería bastante diferente. Ahí están María Beasley, inventora de la balsa salvavidas y que tiene otras catorce patentes; Melitta Bentz, creadora del filtro de café; Bette Nesmith Graham, que nos dejó el corrector líquido; y Mary Anderson, creadora del limpiaparabrisas. 

Y como sucede en toda plataforma de participación abierta, en Mujeres con Calle también apareció alguna que otra curiosidad. Por ejemplo, alguien propone nombrar una calle como Brujas de la noche. Otra, Madres del Pereira, en honor a las mujeres que dan a luz en ese hospital de la ciudad. Otra persona pide una calle para su prima, que murió en un accidente de tránsito; esa propuesta recoge más de 80 adhesiones. También aparecen personas vivas, como la militante palestina Ahed Tamimi, que apenas tiene 19 años, y la Nobel de la Paz Malala Yousafzai. Alguien clama por María Mincheff Lazaroff, referente de la Curva de Maroñas y quien da nombre al estadio de Danubio, y otra pide a María Luisa Díaz, la malograda madre del aún todavía más malogrado Dionisio Díaz. Y por ahí al final aparece Ana María Norbis, nadadora olímpica sanducera que le enseñó a nadar a un pueblo –incluido a quien firma esta nota– y que, si le preguntan, seguro preferiría tener su nombre en una piscina pública que en una calle. Pero ahí está.

Una inauguración

Este sábado 7, de 17 a 23 horas, se inaugurará la plaza Las Pioneras (Agraciada y Aguilar), un espacio que estará gestionado por diversos colectivos feministas en conjunto con la IMM. El evento incluirá una feria gastronómica, talleres de circo para niños y un espectáculo musical a cargo de varios artistas, entre ellos Rossana Taddei y Eli Almic. La entrada es libre.
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