De Tinelli a Buysan: los periodistas deportivos se apoderan del espectáculo

La televisión local tiene ejemplos de conductores deportivos que pasan a otros rubros

Tiempo de lectura: -'

28 de noviembre de 2018 a las 05:04

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 3 45 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 3 45 / mes

Canal 10 tenía que enviarle a la empresa Sony materiales del conductor seleccionado para su versión del programa israelí Kluv Hazahav (La jaula de oro), que en Uruguay se estrenaría como Escape perfecto; demostrar así su trabajo para que la empresa de medios lo aprobara o rechazara. Saeta había elegido a Alberto Sonsol, así que el material que enviaron a la sede de la multinacional fue de programas deportivos como La hora de los deportes y el espacio deportivo de Subrayado.

Lo que terminó de definir la aprobación de Sony a Sonsol fue "el Triplazo", el juego que se realiza en el medio tiempo de los partidos de básquetbol televisados de la Liga Uruguaya, en el que el relator convoca a un integrante del público a que intente embocar un tiro desde la mitad de la cancha para llevarse premios. A través de esas imágenes, los empresarios televisivos vieron que era capaz de llevar adelante un segmento de entretenimiento. Vinculado al deporte, pero entretenimiento al fin.

No fue el primero, ni el último, pero Alberto Sonsol es uno de los ejemplos uruguayos más recientes de periodistas o comunicadores con carreras vinculados al deporte, y luego pasan a programas de otro rubro. En esa lista está también Federico Buysan, que ya pasó por Día perfecto y que este lunes debuta como conductor del programa de preguntas y respuestas Todos contra mí que se emite por Teledoce. Entre los otros nombres locales están: Jorge Piñeyrúa, Rafael Villanueva, Julio Ríos (La palabra), Sergio Gorzy (Buscadores), Juan Carlos Scelza (Locos por saber) y Alejandro Figueredo (Día perfecto).

También hay ejemplos al otro lado del Río de la Plata –los programas argentinos suelen copar las pantallas locales– como el de Alejandro Fantino, Germán Paoloski, y el de un tal Marcelo Tinelli, que antes de ser uno de los reyes de la televisión argentina fue movilero y periodista de fútbol. De hecho Videomatch empezó como un programa deportivo y terminó volcado gradualmente hacia el humor.

Alberto Sonsol recuerda los pasos que lo llevaron a Escape perfecto. “Cuando yo me sumo a  Subrayado tuve una reunión con Martín Villar, el presidente de Canal 10. Empezamos a charlar y en un momento le dije que me veía para conducir Salven el millón. Quedó en esa, pero cuando compran el formato de Escape perfecto, Villar se acordó de esa charla y me sugirió”.

Para él, la capacidad de un periodista deportivo de poder trabajar en otros ámbitos viene determinada por sus orígenes. “Yo hago una separación entre los que venimos de abajo, que tuvimos que trillar la calle y salir a vender avisos para poder salir al aire; y los que ya empezaron de una en medios, en una situación más estable. Creo que esa cuestión te da un valor agregado y te curte. Te permite hacer todo: si me ponés adelante a Mujica o al presidente Vázquez lo entrevisto, me tengo que preparar de otra forma que para hablar con un futbolista, pero siento que lo puedo hacer”.

Federico Buysan, en tanto, no considera que ese paso sea buscado, pero que se genera a medida que surgen los ofrecimientos y los momentos de los programas. Pone como ejemplo lo ocurrido con Día perfecto, en el que empezó como un columnista deportivo, y terminó “cantando y bailando” porque el programa fue cambiando de rumbo.

En el caso de Todos contra mí, la propuesta vino de parte del canal 12 y no dudó en aceptarla. “No lo veo como algo raro, más bien me parece normal. Todo depende del perfil de persona. Yo empecé en el deporte y me formé ahí, pero disfruto de ser comunicador y no me limito a eso. Es un desafío, y no hay que cerrarse a nada, siempre que lo hagas con respeto y profesionalismo”.

Buysan señala que la forma de comunicar “es distinta”, y que la intención de cambiar de rubro requiere confianza en uno mismo, pero que hay un cruce en ambos sectores. “El deporte no deja de ser entretenimiento. En este país no parece, pero se formó como entretenimiento. Es parte de la alegría de la gente”, comentó.

Los cruces de ambos mundos han sido habituales, al punto que incluso algunos futbolistas han saltado a la televisión, como Diego Maradona, Sergio Goycoechea y Sebastián Abreu con Noche de locura

El conductor de Escape Perfecto, programa que lleva seis temporadas al aire y que según la consultora Kantar Ibope Media fue el tercer programa más visto de la televisión abierta el pasado miércoles, considera que en el ámbito del periodismo deportivo hay un espectro muy amplio, pero no cualquiera es relator. "Tenés que ser un poco showman. Además de contar lo que pasa en la cancha, tenés que transmitir las emociones, vos vibrás también. Y si un partido es un show, de ahí a Escape Perfecto no hay mucha distancia”.

En lo que coinciden Buysan y Sonsol es que salir del periodismo deportivo les da también una mayor visibilidad y un acercamiento a un público diferente al habitual. “Cambia el público, porque el deporte es popular pero por ahí es un círculo limitado. Hay gente que puede saber quién sos, y dónde trabajás, pero por ahí no te presta atención porque no le interesa el deporte. Acá entrás a una audiencia más masiva, a la familia completa. Y es bueno mostrar eso”, concluyó Buysan.

CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

Registrate gratis y seguí navegando.