Camilo Dos Santos
Para Mónica Xavier (Partido Socialista) y Rafael Michelini (Nuevo Espacio) el 24 de noviembre también será un día clave en lo que refiere a su futuro laboral y por eso ambos manifestaron a El Observador que aún no pensaron en un plan B y solamente están concentrados en militar para que el candidato oficialista, Daniel Martínez, sea el nuevo presidente de los uruguayos.
Marcos Otheguy, Patricia Ayala y Constanza Moreira no contestaron los mensajes y llamadas que se les realizó desde este medio.
En el Partido Nacional son cinco los que se despiden de la cámara alta: Verónica Alonso, Jorge Saravia, José Carlos Cardoso, Carol Aviaga y Daniel Camy. Guillermo Besozzi también lo hará pero se mantendrá en funciones legislativas porque pasará a la Cámara de Diputados.
Alonso, que secundaba a Juan Sartori en la lista (880) del novel político, se quedó sin la oportunidad de renovar su banca porque Todo por el Pueblo obtuvo 93.588 votos y, por lo tanto, el sector se llevó un solo cargo que fue para el empresario.
Según dijo a El Observador ahora se está ocupando de algunos emprendimientos familiares de “diferentes rubros” como “inmobiliarios” y “hotelería”, aunque espera el resultado del balotaje porque si gana Lacalle Pou “seguramente forme parte del equipo” del nacionalista.
Saravia, en tanto, afirmó que seguirá siendo lo que fue toda su vida, más allá de su figura como político: productor agropecuario. “Yo no vivo de la política, nunca viví. La política a mí me ha hecho poner mucha plata. He puesto más que sacar”, sostuvo.
Cardoso, del departamento de Rocha, también seguirá con una carrera laboral ajena a la política, aunque se mantendrá vinculado a ella. “Yo tengo otras ocupaciones complementarias. Tengo el único diario de Rocha (El Este) y un vespertino de lunes a sábado por suscripción. Además tengo una radio (FM Acuario 94.9) y soy maestro”, expresó.
Mientras que Camy no respondió a las preguntas de este medio, Aviaga relató que tiene aspiraciones de seguir trabajando en el ramo donde ejerció hasta diciembre de 2014, como instrumentista de block quirúrgico. Por otro lado, dijo que le gustaría dedicarse a “generar un centro de coaching con caballos, doma natural y equinoterapia”.
Quien hasta las internas de junio fue precandidato a la Presidencia de la República por el Partido Colorado, José Amorín Batlle, ya sabía que 2019 iba a ser su último año completo en el Senado. “20 años de Parlamento son demasiados y quería algún cambio en todo esto”, señaló.
Aunque cree que su futuro laboral depende de quién gane en la segunda vuelta, el abogado contó que ya volvió a trabajar en su estudio jurídico luego de haberlo dejado en manos de unos socios en este último tiempo.
El líder del Partido Independiente, Pablo Mieres, aseguró que aún no ha pensado en su futuro, contó que ahora está “trabajando por el cambio” pero, de todas formas, plantea que no tendrá inconvenientes si le toca volver a lo que hizo en toda su vida: zambullirse en el estudio de las Ciencias Sociales. Mieres es abogado, sociólogo, fue consultor de opinión pública y realizó estudios de mercado además de haber sido decano de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Católica en 1998.
Fuera de juego
Pero no todos los legisladores procuraron renovar su banca este 27 de octubre. Otros, que en febrero de 2020 se despedirán del Senado, ya sabían que no serían reelectos en su cargo porque decidieron ponerle fin a su actividad política y no se presentaron como candidatos en los últimos comicios celebrados.
Ese es el caso de la ex ministra del Interior, Daisy Tourné, por ejemplo. La socialista no se había candidateado para esta elección porque “25 años es mucho”. “La política desgasta y llega un momento en el que hay que saber irse”, dijo en conversación con El Observador.
Mientras cuenta sus proyectos, mira al futuro con optimismo y sueña con hacer eso que, según dice, desde su adolescencia no podía hacer: no tener horarios ni compromisos.
“Ayer hablaba con una amiga y le decía: ¿te das cuenta que es la primera vez en la vida que elijo a qué hora me levanto, a dónde voy a ir, si voy a ir o no voy a ir? Nunca me pasó eso. Desde que tengo 14 años que estoy metida en la trituradora”, contó.
Diego Battiste
Entre sus planes está volver a dar clases en la escuela de Psicología Social, profesionalizar sus poemas (dice que lo que escribió hasta ahora ha sido todo “de atrevida") y continuar con su “lucha por el feminismo” y “por el desarme y la paz” desde la militancia social.
Leonardo de León es otro de los que no renovó su banca porque ni siquiera se lo propuso. En diciembre del año pasado anunció que renunciaría a su actividad política una vez finalizado este período de gobierno.
Ahora, a poco tiempo de dejar su cargo como senador, analiza algunas ideas que tiene en mente vinculadas al “sector agropecuario” para seguir activo.
Ivonne Passada (MPP), que tampoco renovó su banca porque no se presentó como candidata, solicitará ahora su “reingreso a la docencia específicamente en UTU”.
Rubén Martínez Huelmo (MPP), por su parte, aseguró que no dejará su militancia política pero sí sostuvo que maneja la opción de agregarle alguna “actividad laboral, empresarial, vinculada al comercio exterior”. Además, contó a El Observador que desde una institución deportiva de la que es socio lo invitaron a trabajar, así como en el propio Frente Amplio y desde Argentina por “corresponsalías políticas”.
Pedro Bordaberry es, en este grupo de senadores que no buscaron la reelección, el caso que tomó mayor notoriedad. Lo fue al principio, cuando luego de haber sido candidato por el Partido Colorado en dos elecciones consecutivas (2009 y 2014) decidió abandonar su carrera política y le envió un mail a los legisladores de su sector comunicándoles la decisión. Y lo fue también en este año electoral, cuando intentó dar marcha atrás en su pronunciamiento y encabezar una lista al Senado pero el colorado Ernesto Talvi le dijo que no.
Con las puertas cerradas para continuar en la arena legislativa, Bordaberry aceptó una oferta de trabajo internacional a la que ya empezó a sacarle el jugo. En esta empresa privada —que no quiso dar el nombre por un acuerdo de confidencialidad— el abogado trabaja en “asesoría y consultoría”.