"¿Por qué usas barba tan larga?”, le preguntaron una vez a James Harden. “Porque soy muy vago para afeitarme”, contestó el hombre que causa furor en el arranque de la temporada de la NBA.
Pocos días antes del comienzo de certamen, el ayuda base dejó a los Oklahoma City Thunder y firmó con los Houston Rockets.
Una decisión deportivamente cuestionable ya que los Thunder fueron vicecampeones de la NBA la pasada temporada al tiempo que los Rockets se quedaron afuera de los playoffs.
Y Harden, de 23 años, ya no es un jugador cualquiera: el año pasado fue elegido el mejor sexto hombre de la NBA y además, integró la selección que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres.
La decisión, entonces, se basó en términos esencialmente económicos: los Rockets le ofrecieron US$ 80 millones en cinco temporadas y los Thunder, con un plazo de una hora de aceptación, US$ 55 millones.
Es uno de los contratos más jugosos que se firmaron para esta temporada en la mejor liga del mundo de básquetbol.
El base Deron Williams pasó de New Jersey a Brooklyn Nets y percibirá US$ 95 millones en cinco años.
El ala-pívot Blake Griffin también percibirá la misma suma que Williams en Los Ángeles Clippers.
Después de estas cifras millonarias aparece la barba de Harden quien declaró a Yahoo sentirse decepcionado por el escaso plazo que le dieron los Thunder para analizar su propuesta.
“Era una de las decisiones más importantes de mi vida, quería ir a casa y reflexionar; me molestó”, expresó.
“Vuelvo a los viejos tiempos, tengo que ser el líder, ya sé lo que es ser el centro de atención, el hombre a seguir. Fui el tercero del draft”, agregó ya enfocado en su nueva franquicia.
Harden se declaró elegible en el draft de 2009 después de jugar en los Sun Devils de Arizona a nivel universitario.
Ahora integra el quinteto titular de los Rockets junto al base de origen taiwanés Jeremy Lin, el alero Chandler Parsons y los pívots Patrick Patterson y el turco Ömer Asik.
Su suplente es el argentino Carlos Delfino.
Para los escépticos, Harden causó furor en el arranque de la temporada: en sus dos primeros partidos, saldados con victorias ante Detroit Pistons y Atlanta Hawks, anotó 82 puntos.
Según las estadísticas de ESPN, esos números solo los superaron en los dos primeros partidos de la NBA Wilt Chamberlain y Michael Jordan, dos auténticas leyendas.
Tras cuatro partidos jugados, Harden marcó 121 puntos promediando 30,3 por encuentro lo que lo tiene como líder de goleo de la liga, por delante de Kobe Bryant. El temor a la barba está instalado.
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