"No hace falta ir muy atrás para saber que hay muchos aspectos que hubiesen podido jugar en contra de este sistema", dijo a
BBC Chris Lintott, de la Universidad de Oxford. Es que todavía nadie entiendo cómo Planet Hunter 1 (PH1), como se bautizó a este planeta recientemente descubriendo por la organización homónima, logra mantenerse estable en el universo a pesar de que "las cuatro estrellas que tiran de él crean un ambiente muy complicado”.
Para el investigador de Oxford, este es la cuestión que hace “tan divertido” el hallazgo, descrito en
un artículo que espera ser admitido en la revista científica Astrophysical Jornal y del que además colaboraron instituciones británicas y estadounidenses.
Dos pares de estrellas
Fueron dos voluntarios de la organización
Planet Hunters ("Cazadores de planetas"), que desde 2010 busca identificar tránsitos en el espacio gracias al telescopio Kepler, de la NASA, quienes reconocieron al planeta.
Así, Kian Jek y Robert Gagliano dieron con un mundo que se encuentra a unos 5 mil años luz de distancia y que, se especula, puede ser un “gigante gaseoso”. Los investigadores suponen que la misma es apenas mayor a la de Neptuno, y seis veces la de la Tierra.
No hace falta ir muy atrás para saber que hay muchos aspectos que hubiesen podido jugar en contra de este sistema", dijo a BBC Chris Lintott, de la Universidad de Oxford
En cuento a la masa, Lintott señala en el
blog de Planet Hunters que es “difícil de calcular”. Sin embargo, estiman que sería no más que la mitad de la de Júpiter. “Así que, definitivamente es un planeta”, asegura el blog.
Sin embargo, lo que más llama la atención de PH1 es la cantidad de astros que lo rodean a poca distancia. Se encuentra inserto en un sistema binario, es decir, con dos pares de estrellas. Pero, si bien este tipo de sistemas son comunes en el universo, solo se conocen otros seis planetas que han logrado orbitan en ellos.
Ese no es el único mérito de PH1, el cual, además de orbitar dos estrellas, tiene a otro par girando a su alrededor.
Según dijo Lintott a BBC, lo que indica este fenómeno es que la formación de planetas puede producirse en el interior de los discos protoplanetarios (una nube de gas denso que da origen a los sistemas planetarios).
Todavía más
Planet Hunters emplea los patrones de reconocimiento del Kepler para identificar tránsitos, y desde diciembre de 2010 más de 17 mil voluntaros han trabajado para encontrar planetas en el espacio.
Por eso, para la organización el descubrimiento significa “excelentes noticias”, al tiempo que dice estar segura de que quedan más planetas por descubrir. Pero, a modo de conclusión, invita en su blog: “Por hoy, ¡podemos celebrar la llegada de PH1!”.